amenazante
Éxodo Capítulo 21:24
ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie,
Éxodo Capítulo 21:25
quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe.
Proverbios Capítulo 25:26
Como fuente turbia y manantial corrompido, Es el justo que cae delante del impío.
Mateo Capítulo 4:1
Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo.
Mateo Capítulo 4:2
Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.
Mateo Capítulo 4:3
Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.
Mateo Capítulo 4:4
Él respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.
Mateo Capítulo 4:5
Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo,
Mateo Capítulo 4:6
y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, En sus manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra.
Mateo Capítulo 4:7
Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios.
Mateo Capítulo 4:8
Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos,
Mateo Capítulo 4:9
y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares.
Mateo Capítulo 4:10
Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás.
Mateo Capítulo 4:11
El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían.
Mateo Capítulo 4:12
Cuando Jesús oyó que Juan estaba preso, volvió a Galilea;
Mateo Capítulo 4:13
y dejando a Nazaret, vino y habitó en Capernaum, ciudad marítima, en la región de Zabulón y de Neftalí,
Mateo Capítulo 4:14
para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo:
Mateo Capítulo 4:15
Tierra de Zabulón y tierra de Neftalí, Camino del mar, al otro lado del Jordán, alilea de los gentiles;
Mateo Capítulo 4:16
El pueblo asentado en tinieblas vio gran luz; Y a los asentados en región de sombra de muerte, Luz les resplandeció.
Mateo Capítulo 4:17
Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
Mateo Capítulo 4:18
Andando Jesús junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos, Simón, llamado Pedro, y Andrés su hermano, que echaban la red en el mar; porque eran pescadores.
Mateo Capítulo 4:19
Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres.
Mateo Capítulo 4:20
Ellos entonces, dejando al instante las redes, le siguieron.
Mateo Capítulo 4:21
Pasando de allí, vio a otros dos hermanos, Jacobo hijo de Zebedeo, y Juan su hermano, en la barca con Zebedeo su padre, que remendaban sus redes; y los llamó.
Mateo Capítulo 4:22
Y ellos, dejando al instante la barca y a su padre, le siguieron.
Mateo Capítulo 4:23
Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.
Mateo Capítulo 4:24
Y se difundió su fama por toda Siria; y le trajeron todos los que tenían dolencias, los afligidos por diversas enfermedades y tormentos, los endemoniados, lunáticos y paralíticos; y los sanó.
Mateo Capítulo 4:25
Y le siguió mucha gente de Galilea, de Decápolis, de Jerusalén, de Judea y del otro lado del Jordán.
Mateo Capítulo 5:1
Viendo la multitud, subió al monte; y sentándose, vinieron a él sus discípulos.
Mateo Capítulo 5:2
Y abriendo su boca les enseñaba, diciendo:
Mateo Capítulo 5:3
Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
Mateo Capítulo 5:4
Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación.
Mateo Capítulo 5:5
Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.
Mateo Capítulo 5:6
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
Mateo Capítulo 5:7
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
Mateo Capítulo 5:8
Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
Mateo Capítulo 5:9
Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Mateo Capítulo 5:10
Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
Mateo Capítulo 5:11
Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.
Mateo Capítulo 5:12
Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.
Mateo Capítulo 5:13
Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.
Mateo Capítulo 5:14
Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder.
Mateo Capítulo 5:15
Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa.
Mateo Capítulo 5:16
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que están los cielos.
Mateo Capítulo 5:17
No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir.
Mateo Capítulo 5:18
Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido.
Mateo Capítulo 5:19
De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos.
Mateo Capítulo 5:20
Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.
Mateo Capítulo 5:21
Oísteis que fue dicho a los antiguos: No matarás; y cualquiera que matare será culpable de juicio.
Mateo Capítulo 5:22
Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego.
Mateo Capítulo 5:23
Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti,
Mateo Capítulo 5:24
deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda.
Mateo Capítulo 5:25
Ponte de acuerdo con tu adversario pronto, entre tanto que estás con él en el camino, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil, y seas echado en la cárcel.
Mateo Capítulo 5:26
De cierto te digo que no saldrás de allí, hasta que pagues el último cuadrante.
Mateo Capítulo 5:27
Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio.
Mateo Capítulo 5:28
Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.
Mateo Capítulo 5:29
Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.
Mateo Capítulo 5:30
Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.
Mateo Capítulo 5:31
También fue dicho: Cualquiera que repudie a su mujer, dele carta de divorcio.
Mateo Capítulo 5:32
Pero yo os digo que el que repudia a su mujer, a no ser por causa de fornicación, hace que ella adultere; y el que se casa con la repudiada, comete adulterio.
Mateo Capítulo 5:33
Además habéis oído que fue dicho a los antiguos: No perjurarás, sino cumplirás al Señor tus juramentos.
Mateo Capítulo 5:34
Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios;
Mateo Capítulo 5:35
ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey.
Mateo Capítulo 5:36
Ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello.
Mateo Capítulo 5:37
Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más de esto, de mal procede.
Mateo Capítulo 5:38
Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente.
Mateo Capítulo 5:39
Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra;
Mateo Capítulo 5:40
y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa;
Mateo Capítulo 5:41
y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, vecon él dos.
Mateo Capítulo 5:42
Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.
Mateo Capítulo 5:43
Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo.
Mateo Capítulo 5:44
Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;
Mateo Capítulo 5:45
para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.
Mateo Capítulo 5:46
Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos?
Mateo Capítulo 5:47
Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles?
Mateo Capítulo 5:48
Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.
Mateo Capítulo 26:52
Entonces Jesús le dijo: Vuelve tu espada a su lugar; porque todos los que tomen espada, a espada perecerán.
Mateo Capítulo 26:53
¿Acaso piensas que no puedo ahora orar a mi Padre, y que él no me daría más de doce legiones de ángeles?
Mateo Capítulo 26:54
¿Pero cómo entonces se cumplirían las Escrituras, de que es necesario que así se haga?
Romanos Capítulo 12:19
No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.
Romanos Capítulo 13:4
porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo.
Efesios Capítulo 6:9
Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas, sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que para él no hay acepción de personas.
1 Timoteo Capítulo 5:8
porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.
1 Pedro Capítulo 2:23
quien cuando le maldecían, no respondía con maldición; cuando padecía, no amenazaba, sino encomendaba la causa al que juzga justamente;
1 Pedro Capítulo 5:8
Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar;