los israelitas
Isaías Capítulo 11:2
Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová.
Isaías Capítulo 11:3
Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No juzgará según la vista de sus ojos, ni argüirá por lo que oigan sus oídos;
Isaías Capítulo 11:4
sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío.
Isaías Capítulo 11:5
Y será la justicia cinto de sus lomos, y la fidelidad ceñidor de su cintura.
Juan Capítulo 5:24
De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.
Juan Capítulo 5:25
De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que la oyeren vivirán.
Juan Capítulo 5:26
Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha dado al Hijo el tener vida en sí mismo;
Juan Capítulo 5:27
y también le dio autoridad de hacer juicio, por cuanto es el Hijo del Hombre.
Juan Capítulo 5:28
No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz;
Juan Capítulo 5:29
y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.
Juan Capítulo 5:30
No puedo yo hacer nada por mí mismo; según oigo, así juzgo; y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió, la del Padre.
Juan Capítulo 5:31
Si yo doy testimonio acerca de mí mismo, mi testimonio no es verdadero.
Juan Capítulo 5:32
Otro es el que da testimonio acerca de mí, y sé que el testimonio que da de mí es verdadero.
Juan Capítulo 5:33
Vosotros enviasteis mensajeros a Juan, y él dio testimonio de la verdad.
Juan Capítulo 5:34
Pero yo no recibo testimonio de hombre alguno; mas digo esto, para que vosotros seáis salvos.
Juan Capítulo 5:35
El era antorcha que ardía y alumbraba; y vosotros quisisteis regocijaros por un tiempo en su luz.
Juan Capítulo 5:36
Mas yo tengo mayor testimonio que el de Juan; porque las obras que el Padre me dio para que cumpliese, las mismas obras que yo hago, dan testimonio de mí, que el Padre me ha enviado.
Juan Capítulo 5:37
También el Padre que me envió ha dado testimonio de mí. Nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su aspecto,
Juan Capítulo 5:38
ni tenéis su palabra morando en vosotros; porque a quien él envió, vosotros no creéis.
Juan Capítulo 5:39
Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;
Juan Capítulo 5:40
y no queréis venir a mí para que tengáis vida.
Juan Capítulo 5:41
Gloria de los hombres no recibo.
Juan Capítulo 5:42
Mas yo os conozco, que no tenéis amor de Dios en vosotros.
Juan Capítulo 5:43
Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me recibís; si otro viniere en su propio nombre, a ése recibiréis.
Juan Capítulo 5:44
¿Cómo podéis vosotros creer, pues recibís gloria los unos de los otros, y no buscáis la gloria que viene del Dios único?
Juan Capítulo 6:24
Cuando vio, pues, la gente que Jesús no estaba allí, ni sus discípulos, entraron en las barcas y fueron a Capernaum, buscando a Jesús.
Juan Capítulo 6:25
Y hallándole al otro lado del mar, le dijeron: Rabí, ¿cuándo llegaste acá?
Juan Capítulo 6:26
Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os saciasteis.
Juan Capítulo 6:27
Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece, la cual el Hijo del Hombre os dará; porque a éste señaló Dios el Padre.
Juan Capítulo 6:28
Entonces le dijeron: ¿Qué debemos hacer para poner en práctica las obras de Dios?
Juan Capítulo 6:29
Respondió Jesús y les dijo: Esta es la obra de Dios, que creáis en el que él ha enviado.
Juan Capítulo 6:30
Le dijeron entonces: ¿Qué señal, pues, haces tú, para que veamos, y te creamos? ¿Qué obra haces?
Juan Capítulo 6:31
Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dio a comer.
Juan Capítulo 6:32
Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: No os dio Moisés el pan del cielo, mas mi Padre os da el verdadero pan del cielo.
Juan Capítulo 6:33
Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.
Juan Capítulo 6:34
Le dijeron: Señor, danos siempre este pan.
Juan Capítulo 6:35
Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
Juan Capítulo 6:36
Mas os he dicho, que aunque me habéis visto, no creéis.
Juan Capítulo 6:37
Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.
Juan Capítulo 6:38
Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.
Juan Capítulo 6:39
Y esta es la voluntad del Padre, el que me envió: Que de todo lo que me diere, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero.
Juan Capítulo 6:40
Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
Juan Capítulo 6:41
Murmuraban entonces de él los judíos, porque había dicho: Yo soy el pan que descendió del cielo.
Juan Capítulo 6:42
Y decían: ¿No es éste Jesús, el hijo de José, cuyo padre y madre nosotros conocemos? ¿Cómo, pues, dice éste: Del cielo he descendido?
Juan Capítulo 6:43
Jesús respondió y les dijo: No murmuréis entre vosotros.
Juan Capítulo 6:44
Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero.
Juan Capítulo 17:20
Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos,
Juan Capítulo 17:21
para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.
Juan Capítulo 17:22
La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno.