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Algunos temas bíblicos

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T ... / cuidar niños

cuidar niños

Deuteronomio Capítulo 6:6

Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;

Deuteronomio Capítulo 6:7

y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.

Salmos Capítulo 127:3

He aquí, herencia de Jehová son los hijos; Cosa de estima el fruto del vientre.

Salmos Capítulo 127:4

Como saetas en mano del valiente, Así son los hijos habidos en la juventud.

Salmos Capítulo 127:5

Bienaventurado el hombre que llenó su aljaba de ellos; No será avergonzado Cuando hablare con los enemigos en la puerta.

Proverbios Capítulo 13:24

El que detiene el castigo, a su hijo aborrece; Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.

Proverbios Capítulo 22:6

Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.

Proverbios Capítulo 23:13

No rehúses corregir al muchacho; Porque si lo castigas con vara, no morirá.

Proverbios Capítulo 23:14

Lo castigarás con vara, Y librarás su alma del Seol.

Proverbios Capítulo 29:15

La vara y la corrección dan sabiduría; Mas el muchacho consentido avergonzará a su madre.

Proverbios Capítulo 29:17

Corrige a tu hijo, y te dará descanso, Y dará alegría a tu alma.

Proverbios Capítulo 31:28

Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; Y su marido también la alaba:

Mateo Capítulo 18:1

En aquel tiempo los discípulos vinieron a Jesús, diciendo: ¿Quién es el mayor en el reino de los cielos?

Mateo Capítulo 18:2

Y llamando Jesús a un niño, lo puso en medio de ellos,

Mateo Capítulo 18:3

y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.

Mateo Capítulo 18:4

Así que, cualquiera que se humille como este niño, ése es el mayor en el reino de los cielos.

Mateo Capítulo 18:5

Y cualquiera que reciba en mi nombre a un niño como este, a mí me recibe.

Mateo Capítulo 18:6

Y cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar.

Mateo Capítulo 18:7

¡Ay del mundo por los tropiezos! porque es necesario que vengan tropiezos, pero ¡ay de aquel hombre por quien viene el tropiezo!

Mateo Capítulo 18:8

Por tanto, si tu mano o tu pie te es ocasión de caer, córtalo y échalo de ti; mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno.

Mateo Capítulo 18:9

Y si tu ojo te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti; mejor te es entrar con un solo ojo en la vida, que teniendo dos ojos ser echado en el infierno de fuego.

Mateo Capítulo 18:10

Mirad que no menospreciéis a uno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los cielos ven siempre el rostro de mi Padre que está en los cielos.

Mateo Capítulo 18:11

Porque el Hijo del Hombre ha venido para salvar lo que se había perdido.

Mateo Capítulo 18:12

¿Qué os parece? Si un hombre tiene cien ovejas, y se descarría una de ellas, ¿no deja las noventa y nueve y va por los montes a buscar la que se había descarriado?

Mateo Capítulo 18:13

Y si acontece que la encuentra, de cierto os digo que se regocija más por aquélla, que por las noventa y nueve que no se descarriaron.

Mateo Capítulo 18:14

Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños.

Mateo Capítulo 18:15

Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si te oyere, has ganado a tu hermano.

Mateo Capítulo 18:16

Mas si no te oyere, toma aún contigo a uno o dos, para que en boca de dos o tres testigos conste toda palabra.

Mateo Capítulo 18:17

Si no los oyere a ellos, dilo a la iglesia; y si no oyere a la iglesia, tenle por gentil y publicano.

Mateo Capítulo 18:18

De cierto os digo que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo.

Mateo Capítulo 18:19

Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos.

Mateo Capítulo 18:20

Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.

Mateo Capítulo 18:21

Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete?

Mateo Capítulo 18:22

Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete.

Mateo Capítulo 18:23

Por lo cual el reino de los cielos es semejante a un rey que quiso hacer cuentas con sus siervos.

Mateo Capítulo 18:24

Y comenzando a hacer cuentas, le fue presentado uno que le debía diez mil talentos

Mateo Capítulo 18:25

A éste, como no pudo pagar, ordenó su señor venderle, y a su mujer e hijos, y todo lo que tenía, para que se le pagase la deuda.

Mateo Capítulo 18:26

Entonces aquel siervo, postrado, le suplicaba, diciendo: Señor, ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo.

Mateo Capítulo 18:27

El señor de aquel siervo, movido a misericordia, le soltó y le perdonó la deuda.

Mateo Capítulo 18:28

Pero saliendo aquel siervo, halló a uno de sus consiervos, que le debía cien denarios; y asiendo de él, le ahogaba, diciendo: Págame lo que me debes.

Mateo Capítulo 18:29

Entonces su consiervo, postrándose a sus pies, le rogaba diciendo: Ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo.

Mateo Capítulo 18:30

Mas él no quiso, sino fue y le echó en la cárcel, hasta que pagase la deuda.

Mateo Capítulo 18:31

Viendo sus consiervos lo que pasaba, se entristecieron mucho, y fueron y refirieron a su señor todo lo que había pasado.

Mateo Capítulo 18:32

Entonces, llamándole su señor, le dijo: Siervo malvado, toda aquella deuda te perdoné, porque me rogaste.

Mateo Capítulo 18:33

¿No debías tú también tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti?

Mateo Capítulo 18:34

Entonces su señor, enojado, le entregó a los verdugos, hasta que pagase todo lo que le debía.

Mateo Capítulo 18:35

Así también mi Padre celestial hará con vosotros si no perdonáis de todo corazón cada uno a su hermano sus ofensas.

Mateo Capítulo 19:14

Pero Jesús dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos.

Marcos Capítulo 9:36

Y tomó a un niño, y lo puso en medio de ellos; y tomándole en sus brazos, les dijo:

Marcos Capítulo 9:37

El que reciba en mi nombre a un niño como este, me recibe a mí; y el que a mí me recibe, no me recibe a mí sino al que me envió.

Marcos Capítulo 10:13

Y le presentaban niños para que los tocase; y los discípulos reprendían a los que los presentaban.

Marcos Capítulo 10:14

Viéndolo Jesús, se indignó, y les dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios.

Marcos Capítulo 10:15

De cierto os digo, que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él.

Marcos Capítulo 10:16

Y tomándolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los bendecía.

Efesios Capítulo 6:4

Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.

Colosenses Capítulo 3:21

Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten.

1 Timoteo Capítulo 5:8

porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.

2 Timoteo Capítulo 3:14

Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido;

2 Timoteo Capítulo 3:15

y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.

Santiago Capítulo 1:27

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.

1 Pedro Capítulo 5:2

Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto;

1 Pedro Capítulo 5:3

no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey.

1 Pedro Capítulo 5:4

Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria.