pecando
Mateo Capítulo 7:21
No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
Mateo Capítulo 7:22
Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?
Mateo Capítulo 7:23
Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.
Lucas Capítulo 13:3
Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.
Hechos Capítulo 3:19
Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio,
Romanos Capítulo 10:9
que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.
Romanos Capítulo 10:13
porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.
Gálatas Capítulo 2:20
Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
Gálatas Capítulo 5:19
Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia,
Gálatas Capítulo 5:20
idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,
Gálatas Capítulo 5:21
envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.
Gálatas Capítulo 5:22
Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
Gálatas Capítulo 5:23
mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
Gálatas Capítulo 5:24
Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos.
Gálatas Capítulo 5:25
Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu.
Gálatas Capítulo 5:26
No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros.
Efesios Capítulo 2:8
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;
Colosenses Capítulo 3:2
Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
Colosenses Capítulo 3:3
Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.
Colosenses Capítulo 3:4
Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria.
Colosenses Capítulo 3:5
Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría;
Colosenses Capítulo 3:6
cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia,
Colosenses Capítulo 3:7
en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas.
Colosenses Capítulo 3:8
Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.
Colosenses Capítulo 3:9
No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos,
Colosenses Capítulo 3:10
y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno,
Tito Capítulo 2:12
enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente,
Hebreos Capítulo 10:26
Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados,
Hebreos Capítulo 10:27
sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios.
Santiago Capítulo 4:17
y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.
2 Pedro Capítulo 3:9
El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.
1 Juan Capítulo 2:4
El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él;
1 Juan Capítulo 3:4
Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley; pues el pecado es infracción de la ley.
1 Juan Capítulo 3:6
Todo aquel que permanece en él, no peca; todo aquel que peca, no le ha visto, ni le ha conocido.