protegiendo a israel
Génesis Capítulo 12:3
Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.
Números Capítulo 24:9
Se encorvará para echarse como león, Y como leona; ¿quién lo despertará? Benditos los que te bendijeren, Y malditos los que te maldijeren.
Deuteronomio Capítulo 28:1
Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra.
Deuteronomio Capítulo 28:2
Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.
Deuteronomio Capítulo 28:3
Bendito serás tú en la ciudad, y bendito tú en el campo.
Deuteronomio Capítulo 28:4
Bendito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, el fruto de tus bestias, la cría de tus vacas y los rebaños de tus ovejas.
Deuteronomio Capítulo 28:5
Benditas serán tu canasta y tu artesa de amasar.
Deuteronomio Capítulo 28:6
Bendito serás en tu entrar, y bendito en tu salir.
Deuteronomio Capítulo 28:7
Jehová derrotará a tus enemigos que se levantaren contra ti; por un camino saldrán contra ti, y por siete caminos huirán de delante de ti.
Deuteronomio Capítulo 28:8
Jehová te enviará su bendición sobre tus graneros, y sobre todo aquello en que pusieres tu mano; y te bendecirá en la tierra que Jehová tu Dios te da.
Deuteronomio Capítulo 28:9
Te confirmará Jehová por pueblo santo suyo, como te lo ha jurado, cuando guardares los mandamientos de Jehová tu Dios, y anduvieres en sus caminos.
Deuteronomio Capítulo 28:10
Y verán todos los pueblos de la tierra que el nombre de Jehová es invocado sobre ti, y te temerán.
Deuteronomio Capítulo 28:11
Y te hará Jehová sobreabundar en bienes, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu bestia, y en el fruto de tu tierra, en el país que Jehová juró a tus padres que te había de dar.
Deuteronomio Capítulo 28:12
Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchas naciones, y tú no pedirás prestado.
Deuteronomio Capítulo 28:13
Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas,
Deuteronomio Capítulo 28:14
y si no te apartares de todas las palabras que yo te mando hoy, ni a diestra ni a siniestra, para ir tras dioses ajenos y servirles.
Deuteronomio Capítulo 28:15
Pero acontecerá, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para procurar cumplir todos sus mandamientos y sus estatutos que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán.
Deuteronomio Capítulo 28:16
Maldito serás tú en la ciudad, y maldito en el campo.
Deuteronomio Capítulo 28:17
Maldita tu canasta, y tu artesa de amasar.
Deuteronomio Capítulo 28:18
Maldito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, la cría de tus vacas, y los rebaños de tus ovejas.
Deuteronomio Capítulo 28:19
Maldito serás en tu entrar, y maldito en tu salir.
Deuteronomio Capítulo 28:20
Y Jehová enviará contra ti la maldición, quebranto y asombro en todo cuanto pusieres mano e hicieres, hasta que seas destruido, y perezcas pronto a causa de la maldad de tus obras por las cuales me habrás dejado.
Deuteronomio Capítulo 28:21
Jehová traerá sobre ti mortandad, hasta que te consuma de la tierra a la cual entras para tomar posesión de ella.
Deuteronomio Capítulo 28:22
Jehová te herirá de tisis, de fiebre, de inflamación y de ardor, con sequía, con calamidad repentina y con añublo; y te perseguirán hasta que perezcas.
Deuteronomio Capítulo 28:23
Y los cielos que están sobre tu cabeza serán de bronce, y la tierra que está debajo de ti, de hierro.
Deuteronomio Capítulo 28:24
Dará Jehová por lluvia a tu tierra polvo y ceniza; de los cielos descenderán sobre ti hasta que perezcas.
Deuteronomio Capítulo 28:25
Jehová te entregará derrotado delante de tus enemigos; por un camino saldrás contra ellos, y por siete caminos huirás delante de ellos; y serás vejado por todos los reinos de la tierra.
Deuteronomio Capítulo 28:26
Y tus cadáveres servirán de comida a toda ave del cielo y fiera de la tierra, y no habrá quien las espante.
Deuteronomio Capítulo 28:27
Jehová te herirá con la úlcera de Egipto, con tumores, con sarna, y con comezón de que no puedas ser curado.
Deuteronomio Capítulo 28:28
Jehová te herirá con locura, ceguera y turbación de espíritu;
Deuteronomio Capítulo 28:29
y palparás a mediodía como palpa el ciego en la oscuridad, y no serás prosperado en tus caminos; y no serás sino oprimido y robado todos los días, y no habrá quien te salve.
Deuteronomio Capítulo 28:30
Te desposarás con mujer, y otro varón dormirá con ella; edificarás casa, y no habitarás en ella; plantarás viña, y no la disfrutarás.
Deuteronomio Capítulo 28:31
Tu buey será matado delante de tus ojos, y tú no comerás de él; tu asno será arrebatado de delante de ti, y no te será devuelto; tus ovejas serán dadas a tus enemigos, y no tendrás quien te las rescate.
Deuteronomio Capítulo 28:32
Tus hijos y tus hijas serán entregados a otro pueblo, y tus ojos lo verán, y desfallecerán por ellos todo el día; y no habrá fuerza en tu mano.
Deuteronomio Capítulo 28:33
El fruto de tu tierra y de todo tu trabajo comerá pueblo que no conociste; y no serás sino oprimido y quebrantado todos los días.
Deuteronomio Capítulo 28:34
Y enloquecerás a causa de lo que verás con tus ojos.
Deuteronomio Capítulo 28:35
Te herirá Jehová con maligna pústula en las rodillas y en las piernas, desde la planta de tu pie hasta tu coronilla, sin que puedas ser curado.
Deuteronomio Capítulo 28:36
Jehová te llevará a ti, y al rey que hubieres puesto sobre ti, a nación que no conociste ni tú ni tus padres; y allá servirás a dioses ajenos, al palo y a la piedra.
Deuteronomio Capítulo 28:37
Y serás motivo de horror, y servirás de refrán y de burla a todos los pueblos a los cuales te llevará Jehová.
Deuteronomio Capítulo 28:38
Sacarás mucha semilla al campo, y recogerás poco, porque la langosta lo consumirá.
Deuteronomio Capítulo 28:39
Plantarás viñas y labrarás, pero no beberás vino, ni recogerás uvas, porque el gusano se las comerá.
Deuteronomio Capítulo 28:40
Tendrás olivos en todo tu territorio, mas no te ungirás con el aceite, porque tu aceituna se caerá.
Deuteronomio Capítulo 28:41
Hijos e hijas engendrarás, y no serán para ti, porque irán en cautiverio.
Deuteronomio Capítulo 28:42
Toda tu arboleda y el fruto de tu tierra serán consumidos por la langosta.
Deuteronomio Capítulo 28:43
El extranjero que estará en medio de ti se elevará sobre ti muy alto, y tú descenderás muy abajo.
Deuteronomio Capítulo 28:44
El te prestará a ti, y tú no le prestarás a él; él será por cabeza, y tú serás por cola.
Deuteronomio Capítulo 28:45
Y vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te perseguirán, y te alcanzarán hasta que perezcas; por cuanto no habrás atendido a la voz de Jehová tu Dios, para guardar sus mandamientos y sus estatutos, que él te mandó;
Deuteronomio Capítulo 28:46
y serán en ti por señal y por maravilla, y en tu descendencia para siempre.
Deuteronomio Capítulo 28:47
Por cuanto no serviste a Jehová tu Dios con alegría y con gozo de corazón, por la abundancia de todas las cosas,
Deuteronomio Capítulo 28:48
servirás, por tanto, a tus enemigos que enviare Jehová contra ti, con hambre y con sed y con desnudez, y con falta de todas las cosas; y él pondrá yugo de hierro sobre tu cuello, hasta destruirte.
Deuteronomio Capítulo 28:49
Jehová traerá contra ti una nación de lejos, del extremo de la tierra, que vuele como águila, nación cuya lengua no entiendas;
Deuteronomio Capítulo 28:50
gente fiera de rostro, que no tendrá respeto al anciano, ni perdonará al niño;
Deuteronomio Capítulo 28:51
y comerá el fruto de tu bestia y el fruto de tu tierra, hasta que perezcas; y no te dejará grano, ni mosto, ni aceite, ni la cría de tus vacas, ni los rebaños de tus ovejas, hasta destruirte.
Deuteronomio Capítulo 28:52
Pondrá sitio a todas tus ciudades, hasta que caigan tus muros altos y fortificados en que tú confías, en toda tu tierra; sitiará, pues, todas tus ciudades y toda la tierra que Jehová tu Dios te hubiere dado.
Deuteronomio Capítulo 28:53
Y comerás el fruto de tu vientre, la carne de tus hijos y de tus hijas que Jehová tu Dios te dio, en el sitio y en el apuro con que te angustiará tu enemigo.
Deuteronomio Capítulo 28:54
El hombre tierno en medio de ti, y el muy delicado, mirará con malos ojos a su hermano, y a la mujer de su seno, y al resto de sus hijos que le quedaren;
Deuteronomio Capítulo 28:55
para no dar a alguno de ellos de la carne de sus hijos, que él comiere, por no haberle quedado nada, en el asedio y en el apuro con que tu enemigo te oprimirá en todas tus ciudades.
Deuteronomio Capítulo 28:56
La tierna y la delicada entre vosotros, que nunca la planta de su pie intentaría sentar sobre la tierra, de pura delicadeza y ternura, mirará con malos ojos al marido de su seno, a su hijo, a su hija,
Deuteronomio Capítulo 28:57
al recién nacido que sale de entre sus pies, y a sus hijos que diere a luz; pues los comerá ocultamente, por la carencia de todo, en el asedio y en el apuro con que tu enemigo te oprimirá en tus ciudades.
Deuteronomio Capítulo 28:58
Si no cuidares de poner por obra todas las palabras de esta ley que están escritas en este libro, temiendo este nombre glorioso y temible: JEHOVÁ TU DIOS,
Deuteronomio Capítulo 28:59
entonces Jehová aumentará maravillosamente tus plagas y las plagas de tu descendencia, plagas grandes y permanentes, y enfermedades malignas y duraderas;
Deuteronomio Capítulo 28:60
y traerá sobre ti todos los males de Egipto, delante de los cuales temiste, y no te dejarán.
Deuteronomio Capítulo 28:61
Asimismo toda enfermedad y toda plaga que no está escrita en el libro de esta ley, Jehová la enviará sobre ti, hasta que seas destruido.
Deuteronomio Capítulo 28:62
Y quedaréis pocos en número, en lugar de haber sido como las estrellas del cielo en multitud, por cuanto no obedecisteis a la voz de Jehová tu Dios.
Deuteronomio Capítulo 28:63
Así como Jehová se gozaba en haceros bien y en multiplicaros, así se gozará Jehová en arruinaros y en destruiros; y seréis arrancados de sobre la tierra a la cual entráis para tomar posesión de ella.
Deuteronomio Capítulo 28:64
Y Jehová te esparcirá por todos los pueblos, desde un extremo de la tierra hasta el otro extremo; y allí servirás a dioses ajenos que no conociste tú ni tus padres, al leño y a la piedra.
Deuteronomio Capítulo 28:65
Y ni aun entre estas naciones descansarás, ni la planta de tu pie tendrá reposo; pues allí te dará Jehová corazón temeroso, y desfallecimiento de ojos, y tristeza de alma;
Deuteronomio Capítulo 28:66
y tendrás tu vida como algo que pende delante de ti, y estarás temeroso de noche y de día, y no tendrás seguridad de tu vida.
Deuteronomio Capítulo 28:67
Por la mañana dirás: ¡Quién diera que fuese la tarde! y a la tarde dirás: ¡Quién diera que fuese la mañana! por el miedo de tu corazón con que estarás amedrentado, y por lo que verán tus ojos.
Deuteronomio Capítulo 28:68
Y Jehová te hará volver a Egipto en naves, por el camino del cual te ha dicho: Nunca más volverás; y allí seréis vendidos a vuestros enemigos por esclavos y por esclavas, y no habrá quien os compre.
Salmos Capítulo 83:1
Oh Dios, no guardes silencio; No calles, oh Dios, ni te estés quieto.
Salmos Capítulo 83:2
Porque he aquí que rugen tus enemigos, Y los que te aborrecen alzan cabeza.
Salmos Capítulo 83:3
Contra tu pueblo han consultado astuta y secretamente, Y han entrado en consejo contra tus protegidos.
Salmos Capítulo 83:4
Han dicho: Venid, y destruyámoslos para que no sean nación, Y no haya más memoria del nombre de Israel.
Salmos Capítulo 83:5
Porque se confabulan de corazón a una, Contra ti han hecho alianza
Salmos Capítulo 83:6
Las tiendas de los edomitas y de los ismaelitas, Moab y los agarenos;
Salmos Capítulo 83:7
Gebal, Amón y Amalec, Los filisteos y los habitantes de Tiro.
Salmos Capítulo 83:8
También el asirio se ha juntado con ellos; Sirven de brazo a los hijos de Lot. Selah
Salmos Capítulo 83:9
Hazles como a Madián, Como a Sísara, como a Jabín en el arroyo de Cisón;
Salmos Capítulo 83:10
Que perecieron en Endor, Fueron hechos como estiércol para la tierra.
Salmos Capítulo 83:11
Pon a sus capitanes como a Oreb y a Zeeb; Como a Zeba y a Zalmuna a todos sus príncipes,
Salmos Capítulo 83:12
Que han dicho: Heredemos para nosotros Las moradas de Dios.
Salmos Capítulo 83:13
Dios mío, ponlos como torbellinos, Como hojarascas delante del viento,
Salmos Capítulo 83:14
Como fuego que quema el monte, Como llama que abrasa el bosque.
Salmos Capítulo 83:15
Persíguelos así con tu tempestad, Y atérralos con tu torbellino.
Salmos Capítulo 83:16
Llena sus rostros de vergüenza, Y busquen tu nombre, oh Jehová.
Salmos Capítulo 83:17
Sean afrentados y turbados para siempre; Sean deshonrados, y perezcan.
Salmos Capítulo 83:18
Y conozcan que tu nombre es Jehová; Tú solo Altísimo sobre toda la tierra.
Salmos Capítulo 122:6
Pedid por la paz de Jerusalén; Sean prosperados los que te aman.
Isaías Capítulo 41:11
He aquí que todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y confundidos; serán como nada y perecerán los que contienden contigo.
Isaías Capítulo 41:12
Buscarás a los que tienen contienda contigo, y no los hallarás; serán como nada, y como cosa que no es, aquellos que te hacen la guerra.
Isaías Capítulo 60:12
Porque la nación o el reino que no te sirviere perecerá, y del todo será asolado.
Joel Capítulo 3:1
Porque he aquí que en aquellos días, y en aquel tiempo en que haré volver la cautividad de Judá y de Jerusalén,
Joel Capítulo 3:2
reuniré a todas las naciones, y las haré descender al valle de Josafat, y allí entraré en juicio con ellas a causa de mi pueblo, y de Israel mi heredad, a quien ellas esparcieron entre las naciones, y repartieron mi tierra;
Joel Capítulo 3:3
y echaron suertes sobre mi pueblo, y dieron los niños por una ramera, y vendieron las niñas por vino para beber.
Zacarías Capítulo 2:8
Porque así ha dicho Jehová de los ejércitos: Tras la gloria me enviará él a las naciones que os despojaron; porque el que os toca, toca a la niña de su ojo.
Zacarías Capítulo 12:1
Profecía de la palabra de Jehová acerca de Israel. Jehová, que extiende los cielos y funda la tierra, y forma el espíritu del hombre dentro de él, ha dicho:
Zacarías Capítulo 12:2
He aquí yo pongo a Jerusalén por copa que hará temblar a todos los pueblos de alrededor contra Judá, en el sitio contra Jerusalén.
Zacarías Capítulo 12:3
Y en aquel día yo pondré a Jerusalén por piedra pesada a todos los pueblos; todos los que se la cargaren serán despedazados, bien que todas las naciones de la tierra se juntarán contra ella.
Zacarías Capítulo 12:4
En aquel día, dice Jehová, heriré con pánico a todo caballo, y con locura al jinete; mas sobre la casa de Judá abriré mis ojos, y a todo caballo de los pueblos heriré con ceguera.
Zacarías Capítulo 12:5
Y los capitanes de Judá dirán en su corazón: Tienen fuerza los habitantes de Jerusalén en Jehová de los ejércitos, su Dios.
Zacarías Capítulo 12:6
En aquel día pondré a los capitanes de Judá como brasero de fuego entre leña, y como antorcha ardiendo entre gavillas; y consumirán a diestra y a siniestra a todos los pueblos alrededor; y Jerusalén será otra vez habitada en su lugar, en Jerusalén.
Zacarías Capítulo 12:7
Y librará Jehová las tiendas de Judá primero, para que la gloria de la casa de David y del habitante de Jerusalén no se engrandezca sobre Judá.
Zacarías Capítulo 12:8
En aquel día Jehová defenderá al morador de Jerusalén; el que entre ellos fuere débil, en aquel tiempo será como David; y la casa de David como Dios, como el ángel de Jehová delante de ellos.
Zacarías Capítulo 12:9
Y en aquel día yo procuraré destruir a todas las naciones que vinieren contra Jerusalén.
Zacarías Capítulo 12:10
Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito.
Zacarías Capítulo 12:11
En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén, como el llanto de Hadadrimón en el valle de Meguido.
Zacarías Capítulo 12:12
Y la tierra lamentará, cada linaje aparte; los descendientes de la casa de David por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de la casa de Natán por sí, y sus mujeres por sí;
Zacarías Capítulo 12:13
los descendientes de la casa de Leví por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de Simei por sí, y sus mujeres por sí;
Zacarías Capítulo 12:14
todos los otros linajes, cada uno por sí, y sus mujeres por sí.
Malaquías Capítulo 3:6
Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos.
Romanos Capítulo 11:1
Digo, pues: ¿Ha desechado Dios a su pueblo? En ninguna manera. Porque también yo soy israelita, de la descendencia de Abraham, de la tribu de Benjamín.
Romanos Capítulo 11:2
No ha desechado Dios a su pueblo, al cual desde antes conoció. ¿O no sabéis qué dice de Elías la Escritura, cómo invoca a Dios contra Israel, diciendo:
Romanos Capítulo 11:3
Señor, a tus profetas han dado muerte, y tus altares han derribado; y sólo yo he quedado, y procuran matarme?
Romanos Capítulo 11:4
Pero ¿qué le dice la divina respuesta? Me he reservado siete mil hombres, que no han doblado la rodilla delante de Baal.
Romanos Capítulo 11:5
Así también aun en este tiempo ha quedado un remanente escogido por gracia.
Romanos Capítulo 11:6
Y si por gracia, ya no es por obras; de otra manera la gracia ya no es gracia. Y si por obras, ya no es gracia; de otra manera la obra ya no es obra.
Romanos Capítulo 11:7
¿Qué pues? Lo que buscaba Israel, no lo ha alcanzado; pero los escogidos sí lo han alcanzado, y los demás fueron endurecidos;
Romanos Capítulo 11:8
como está escrito: Dios les dio espíritu de estupor, ojos con que no vean y oídos con que no oigan, hasta el día de hoy.
Romanos Capítulo 11:9
Y David dice: Sea vuelto su convite en trampa y en red, En tropezadero y en retribución;
Romanos Capítulo 11:10
Sean oscurecidos sus ojos para que no vean, Y agóbiales la espalda para siempre.
Romanos Capítulo 11:11
Digo, pues: ¿Han tropezado los de Israel para que cayesen? En ninguna manera; pero por su transgresión vino la salvación a los gentiles, para provocarles a celos.
Romanos Capítulo 11:12
Y si su transgresión es la riqueza del mundo, y su defección la riqueza de los gentiles, ¿cuánto más su plena restauración?
Romanos Capítulo 11:13
Porque a vosotros hablo, gentiles. Por cuanto yo soy apóstol a los gentiles, honro mi ministerio,
Romanos Capítulo 11:14
por si en alguna manera pueda provocar a celos a los de mi sangre, y hacer salvos a algunos de ellos.
Romanos Capítulo 11:15
Porque si su exclusión es la reconciliación del mundo, ¿qué será su admisión, sino vida de entre los muertos?
Romanos Capítulo 11:16
Si las primicias son santas, también lo es la masa restante; y si la raíz es santa, también lo son las ramas.
Romanos Capítulo 11:17
Pues si algunas de las ramas fueron desgajadas, y tú, siendo olivo silvestre, has sido injertado en lugar de ellas, y has sido hecho participante de la raíz y de la rica savia del olivo,
Romanos Capítulo 11:18
no te jactes contra las ramas; y si te jactas, sabe que no sustentas tú a la raíz, sino la raíz a ti.
Romanos Capítulo 11:19
Pues las ramas, dirás, fueron desgajadas para que yo fuese injertado.
Romanos Capítulo 11:20
Bien; por su incredulidad fueron desgajadas, pero tú por la fe estás en pie. No te ensoberbezcas, sino teme.
Romanos Capítulo 11:21
Porque si Dios no perdonó a las ramas naturales, a ti tampoco te perdonará.
Romanos Capítulo 11:22
Mira, pues, la bondad y la severidad de Dios; la severidad ciertamente para con los que cayeron, pero la bondad para contigo, si permaneces en esa bondad; pues de otra manera tú también serás cortado.
Romanos Capítulo 11:23
Y aun ellos, si no permanecieren en incredulidad, serán injertados, pues poderoso es Dios para volverlos a injertar.
Romanos Capítulo 11:24
Porque si tú fuiste cortado del que por naturaleza es olivo silvestre, y contra naturaleza fuiste injertado en el buen olivo, ¿cuánto más éstos, que son las ramas naturales, serán injertados en su propio olivo?
Romanos Capítulo 11:25
Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles;
Romanos Capítulo 11:26
y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, Que apartará de Jacob la impiedad.
Romanos Capítulo 11:27
Y este será mi pacto con ellos, Cuando yo quite sus pecados.
Romanos Capítulo 11:28
Así que en cuanto al evangelio, son enemigos por causa de vosotros; pero en cuanto a la elección, son amados por causa de los padres.
Romanos Capítulo 11:29
Porque irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios.
Romanos Capítulo 11:30
Pues como vosotros también en otro tiempo erais desobedientes a Dios, pero ahora habéis alcanzado misericordia por la desobediencia de ellos,
Romanos Capítulo 11:31
así también éstos ahora han sido desobedientes, para que por la misericordia concedida a vosotros, ellos también alcancen misericordia.
Romanos Capítulo 11:32
Porque Dios sujetó a todos en desobediencia, para tener misericordia de todos.
Romanos Capítulo 11:33
¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos!
Romanos Capítulo 11:34
Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero?
Romanos Capítulo 11:35
¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado?
Romanos Capítulo 11:36
Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.