plantar semillas para la cosecha
Salmos Capítulo 126:6
Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas.
Jeremías Capítulo 17:8
Porque será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y no verá cuando viene el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de dar fruto.
Mateo Capítulo 13:30
Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero.
Juan Capítulo 15:1
Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador.
Juan Capítulo 15:2
Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto.
Juan Capítulo 15:3
Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado.
Juan Capítulo 15:4
Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
Juan Capítulo 15:5
Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
Juan Capítulo 15:6
El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden.
Juan Capítulo 15:7
Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.
Juan Capítulo 15:8
En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos.
Juan Capítulo 15:9
Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor.
Juan Capítulo 15:10
Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor.
Juan Capítulo 15:11
Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido.
Juan Capítulo 15:12
Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado.
Juan Capítulo 15:13
Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.
Juan Capítulo 15:14
Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.
Juan Capítulo 15:15
Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer.
Juan Capítulo 15:16
No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.
Juan Capítulo 15:17
Esto os mando: Que os améis unos a otros.
Juan Capítulo 15:18
Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros.
Juan Capítulo 15:19
Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece.
Juan Capítulo 15:20
Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la vuestra.
Juan Capítulo 15:21
Mas todo esto os harán por causa de mi nombre, porque no conocen al que me ha enviado.
Juan Capítulo 15:22
Si yo no hubiera venido, ni les hubiera hablado, no tendrían pecado; pero ahora no tienen excusa por su pecado.
Juan Capítulo 15:23
El que me aborrece a mí, también a mi Padre aborrece.
Juan Capítulo 15:24
Si yo no hubiese hecho entre ellos obras que ningún otro ha hecho, no tendrían pecado; pero ahora han visto y han aborrecido a mí y a mi Padre.
Juan Capítulo 15:25
Pero esto es para que se cumpla la palabra que está escrita en su ley: Sin causa me aborrecieron.
Juan Capítulo 15:26
Pero cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio acerca de mí.
Juan Capítulo 15:27
Y vosotros daréis testimonio también, porque habéis estado conmigo desde el principio.
1 Corintios Capítulo 3:6
Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios.
1 Corintios Capítulo 3:7
Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento.
1 Corintios Capítulo 3:8
Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor.
1 Corintios Capítulo 3:9
Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.
Gálatas Capítulo 6:9
No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos.
Santiago Capítulo 5:7
Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía.
Santiago Capítulo 5:8
Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca.
Santiago Capítulo 5:9
Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta.
Santiago Capítulo 5:10
Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor.
Santiago Capítulo 5:11
He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo.