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Isaías Capítulo 52:7

¡Cuán hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sion: ¡Tu Dios reina!

Jeremías Capítulo 1:7

Y me dijo Jehová: No digas: Soy un niño; porque a todo lo que te envíe irás tú, y dirás todo lo que te mande.

Jeremías Capítulo 29:11

Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

Mateo Capítulo 10:7

Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado.

Mateo Capítulo 10:8

Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia.

Mateo Capítulo 10:9

No os proveáis de oro, ni plata, ni cobre en vuestros cintos;

Mateo Capítulo 10:10

ni de alforja para el camino, ni de dos túnicas, ni de calzado, ni de bordón; porque el obrero es digno de su alimento.

Mateo Capítulo 10:11

Mas en cualquier ciudad o aldea donde entréis, informaos quién en ella sea digno, y posad allí hasta que salgáis.

Mateo Capítulo 10:12

Y al entrar en la casa, saludadla.

Mateo Capítulo 10:13

Y si la casa fuere digna, vuestra paz vendrá sobre ella; mas si no fuere digna, vuestra paz se volverá a vosotros.

Mateo Capítulo 10:14

Y si alguno no os recibiere, ni oyere vuestras palabras, salid de aquella casa o ciudad, y sacudid el polvo de vuestros pies.

Mateo Capítulo 25:35

Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis;

Mateo Capítulo 25:36

estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.

Mateo Capítulo 25:37

Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber?

Mateo Capítulo 25:38

¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos?

Mateo Capítulo 25:39

¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?

Mateo Capítulo 25:40

Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.

Mateo Capítulo 28:19

Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;

Marcos Capítulo 1:1

Principio del evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios.

Marcos Capítulo 1:2

Como está escrito en Isaías el profeta: He aquí yo envío mi mensajero delante de tu faz, El cual preparará tu camino delante de ti.

Marcos Capítulo 1:3

Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor; Enderezad sus sendas.

Marcos Capítulo 1:4

Bautizaba Juan en el desierto, y predicaba el bautismo de arrepentimiento para perdón de pecados.

Marcos Capítulo 1:5

Y salían a él toda la provincia de Judea, y todos los de Jerusalén; y eran bautizados por él en el río Jordán, confesando sus pecados.

Marcos Capítulo 1:6

Y Juan estaba vestido de pelo de camello, y tenía un cinto de cuero alrededor de sus lomos; y comía langostas y miel silvestre.

Marcos Capítulo 1:7

Y predicaba, diciendo: Viene tras mí el que es más poderoso que yo, a quien no soy digno de desatar encorvado la correa de su calzado.

Marcos Capítulo 1:8

Yo a la verdad os he bautizado con agua; pero él os bautizará con Espíritu Santo.

Marcos Capítulo 1:9

Aconteció en aquellos días, que Jesús vino de Nazaret de Galilea, y fue bautizado por Juan en el Jordán.

Marcos Capítulo 1:10

Y luego, cuando subía del agua, vio abrirse los cielos, y al Espíritu como paloma que descendía sobre él.

Marcos Capítulo 1:11

Y vino una voz de los cielos que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia.

Marcos Capítulo 1:12

Y luego el Espíritu le impulsó al desierto.

Marcos Capítulo 1:13

Y estuvo allí en el desierto cuarenta días, y era tentado por Satanás, y estaba con las fieras; y los ángeles le servían.

Marcos Capítulo 1:14

Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios,

Marcos Capítulo 1:15

diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.

Marcos Capítulo 1:16

Andando junto al mar de Galilea, vio a Simón y a Andrés su hermano, que echaban la red en el mar; porque eran pescadores.

Marcos Capítulo 1:17

Y les dijo Jesús: Venid en pos de mí, y haré que seáis pescadores de hombres.

Marcos Capítulo 1:18

Y dejando luego sus redes, le siguieron.

Marcos Capítulo 1:19

Pasando de allí un poco más adelante, vio a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan su hermano, también ellos en la barca, que remendaban las redes.

Marcos Capítulo 1:20

Y luego los llamó; y dejando a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros, le siguieron.

Marcos Capítulo 1:21

Y entraron en Capernaum; y los días de reposo, entrando en la sinagoga, enseñaba.

Marcos Capítulo 1:22

Y se admiraban de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.

Marcos Capítulo 1:23

Pero había en la sinagoga de ellos un hombre con espíritu inmundo, que dio voces,

Marcos Capítulo 1:24

diciendo: ¡Ah! ¿qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos? Sé quién eres, el Santo de Dios.

Marcos Capítulo 1:25

Pero Jesús le reprendió, diciendo: ¡Cállate, y sal de él!

Marcos Capítulo 1:26

Y el espíritu inmundo, sacudiéndole con violencia, y clamando a gran voz, salió de él.

Marcos Capítulo 1:27

Y todos se asombraron, de tal manera que discutían entre sí, diciendo: ¿Qué es esto? ¿Qué nueva doctrina es esta, que con autoridad manda aun a los espíritus inmundos, y le obedecen?

Marcos Capítulo 1:28

Y muy pronto se difundió su fama por toda la provincia alrededor de Galilea.

Marcos Capítulo 1:29

Al salir de la sinagoga, vinieron a casa de Simón y Andrés, con Jacobo y Juan.

Marcos Capítulo 1:30

Y la suegra de Simón estaba acostada con fiebre; y en seguida le hablaron de ella.

Marcos Capítulo 1:31

Entonces él se acercó, y la tomó de la mano y la levantó; e inmediatamente le dejó la fiebre, y ella les servía.

Marcos Capítulo 1:32

Cuando llegó la noche, luego que el sol se puso, le trajeron todos los que tenían enfermedades, y a los endemoniados;

Marcos Capítulo 1:33

y toda la ciudad se agolpó a la puerta.

Marcos Capítulo 1:34

Y sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y echó fuera muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios, porque le conocían.

Marcos Capítulo 1:35

Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba.

Marcos Capítulo 1:36

Y le buscó Simón, y los que con él estaban;

Marcos Capítulo 1:37

y hallándole, le dijeron: Todos te buscan.

Marcos Capítulo 1:38

El les dijo: Vamos a los lugares vecinos, para que predique también allí; porque para esto he venido.

Marcos Capítulo 1:39

Y predicaba en las sinagogas de ellos en toda Galilea, y echaba fuera los demonios.

Marcos Capítulo 1:40

Vino a él un leproso, rogándole; e hincada la rodilla, le dijo: Si quieres, puedes limpiarme.

Marcos Capítulo 1:41

Y Jesús, teniendo misericordia de él, extendió la mano y le tocó, y le dijo: Quiero, sé limpio.

Marcos Capítulo 1:42

Y así que él hubo hablado, al instante la lepra se fue de aquél, y quedó limpio.

Marcos Capítulo 1:43

Entonces le encargó rigurosamente, y le despidió luego,

Marcos Capítulo 1:44

y le dijo: Mira, no digas a nadie nada, sino ve, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu purificación lo que Moisés mandó, para testimonio a ellos.

Marcos Capítulo 1:45

Pero ido él, comenzó a publicarlo mucho y a divulgar el hecho, de manera que ya Jesús no podía entrar abiertamente en la ciudad, sino que se quedaba fuera en los lugares desiertos; y venían a él de todas partes.

Marcos Capítulo 16:15

Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.

Hechos Capítulo 1:8

pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.

Hechos Capítulo 20:28

Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre.

Romanos Capítulo 10:14

¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?

2 Timoteo Capítulo 4:2

que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.

1 Pedro Capítulo 2:9

Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;