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Algunos temas bíblicos

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N ... / no ir a la iglesia

no ir a la iglesia

Salmos Capítulo 95:1

Venid, aclamemos alegremente a Jehová; Cantemos con júbilo a la roca de nuestra salvación.

Salmos Capítulo 95:2

Lleguemos ante su presencia con alabanza; Aclamémosle con cánticos.

Salmos Capítulo 95:3

Porque Jehová es Dios grande, Y Rey grande sobre todos los dioses.

Salmos Capítulo 95:4

Porque en su mano están las profundidades de la tierra, Y las alturas de los montes son suyas.

Salmos Capítulo 95:5

Suyo también el mar, pues él lo hizo; Y sus manos formaron la tierra seca.

Salmos Capítulo 95:6

Venid, adoremos y postrémonos; Arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor.

Salmos Capítulo 95:7

Porque él es nuestro Dios; Nosotros el pueblo de su prado, y ovejas de su mano. Si oyereis hoy su voz,

Salmos Capítulo 95:8

No endurezcáis vuestro corazón, como en Meriba, Como en el día de Masah en el desierto,

Salmos Capítulo 95:9

Donde me tentaron vuestros padres, Me probaron, y vieron mis obras.

Salmos Capítulo 95:10

Cuarenta años estuve disgustado con la nación, Y dije: Pueblo es que divaga de corazón, Y no han conocido mis caminos.

Salmos Capítulo 95:11

Por tanto, juré en mi furor Que no entrarían en mi reposo.

Salmos Capítulo 122:1

Yo me alegré con los que me decían: A la casa de Jehová iremos.

Salmos Capítulo 122:2

Nuestros pies estuvieron Dentro de tus puertas, oh Jerusalén.

Salmos Capítulo 122:3

Jerusalén, que se ha edificado Como una ciudad que está bien unida entre sí.

Salmos Capítulo 122:4

Y allá subieron las tribus, las tribus de JAH, Conforme al testimonio dado a Israel, Para alabar el nombre de Jehová.

Salmos Capítulo 122:5

Porque allá están las sillas del juicio, Los tronos de la casa de David.

Salmos Capítulo 122:6

Pedid por la paz de Jerusalén; Sean prosperados los que te aman.

Salmos Capítulo 122:7

Sea la paz dentro de tus muros, Y el descanso dentro de tus palacios.

Salmos Capítulo 122:8

Por amor de mis hermanos y mis compañeros Diré yo: La paz sea contigo.

Salmos Capítulo 122:9

Por amor a la casa de Jehová nuestro Dios Buscaré tu bien.

Salmos Capítulo 139:7

¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia?

Proverbios Capítulo 18:1

Su deseo busca el que se desvía, Y se entremete en todo negocio.

Proverbios Capítulo 28:9

El que aparta su oído para no oír la ley, Su oración también es abominable.

Proverbios Capítulo 28:10

El que hace errar a los rectos por el mal camino, El caerá en su misma fosa; Mas los perfectos heredarán el bien.

Proverbios Capítulo 28:11

El hombre rico es sabio en su propia opinión; Mas el pobre entendido lo escudriña.

Proverbios Capítulo 28:12

Cuando los justos se alegran, grande es la gloria; Mas cuando se levantan los impíos, tienen que esconderse los hombres.

Proverbios Capítulo 28:13

El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.

Proverbios Capítulo 28:14

Bienaventurado el hombre que siempre teme a Dios; Mas el que endurece su corazón caerá en el mal.

Proverbios Capítulo 28:15

León rugiente y oso hambriento Es el príncipe impío sobre el pueblo pobre.

Proverbios Capítulo 28:16

El príncipe falto de entendimiento multiplicará la extorsión; Mas el que aborrece la avaricia prolongará sus días.

Proverbios Capítulo 28:17

El hombre cargado de la sangre de alguno Huirá hasta el sepulcro, y nadie le detendrá.

Proverbios Capítulo 28:18

El que en integridad camina será salvo; Mas el de perversos caminos caerá en alguno.

Proverbios Capítulo 28:19

El que labra su tierra se saciará de pan; Mas el que sigue a los ociosos se llenará de pobreza.

Proverbios Capítulo 28:20

El hombre de verdad tendrá muchas bendiciones; Mas el que se apresura a enriquecerse no será sin culpa.

Proverbios Capítulo 28:21

Hacer acepción de personas no es bueno; Hasta por un bocado de pan prevaricará el hombre.

Proverbios Capítulo 28:22

Se apresura a ser rico el avaro, Y no sabe que le ha de venir pobreza.

Proverbios Capítulo 28:23

El que reprende al hombre, hallará después mayor gracia Que el que lisonjea con la lengua.

Mateo Capítulo 9:21

porque decía dentro de sí: Si tocare solamente su manto, seré salva.

Mateo Capítulo 9:22

Pero Jesús, volviéndose y mirándola, dijo: Ten ánimo, hija; tu fe te ha salvado. Y la mujer fue salva desde aquella hora.

Mateo Capítulo 11:28

Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.

Mateo Capítulo 18:20

Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.

Hechos Capítulo 17:24

El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas,

Hebreos Capítulo 10:1

Porque la ley, teniendo la sombra de los bienes venideros, no la imagen misma de las cosas, nunca puede, por los mismos sacrificios que se ofrecen continuamente cada año, hacer perfectos a los que se acercan.

Hebreos Capítulo 10:2

De otra manera cesarían de ofrecerse, pues los que tributan este culto, limpios una vez, no tendrían ya más conciencia de pecado.

Hebreos Capítulo 10:3

Pero en estos sacrificios cada año se hace memoria de los pecados;

Hebreos Capítulo 10:4

porque la sangre de los toros y de los machos cabríos no puede quitar los pecados.

Hebreos Capítulo 10:5

Por lo cual, entrando en el mundo dice: Sacrificio y ofrenda no quisiste; Mas me preparaste cuerpo.

Hebreos Capítulo 10:6

Holocaustos y expiaciones por el pecado no te agradaron.

Hebreos Capítulo 10:7

Entonces dije: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, Como en el rollo del libro está escrito de mí.

Hebreos Capítulo 10:8

Diciendo primero: Sacrificio y ofrenda y holocaustos y expiaciones por el pecado no quisiste, ni te agradaron (las cuales cosas se ofrecen según la ley),

Hebreos Capítulo 10:9

y diciendo luego: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad; quita lo primero, para establecer esto último.

Hebreos Capítulo 10:10

En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre.

Hebreos Capítulo 10:11

Y ciertamente todo sacerdote está día tras día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pecados;

Hebreos Capítulo 10:12

pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios,

Hebreos Capítulo 10:13

de ahí en adelante esperando hasta que sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies;

Hebreos Capítulo 10:14

porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.

Hebreos Capítulo 10:15

Y nos atestigua lo mismo el Espíritu Santo; porque después de haber dicho:

Hebreos Capítulo 10:16

Este es el pacto que haré con ellos Después de aquellos días, dice el Señor: Pondré mis leyes en sus corazones, Y en sus mentes las escribiré,

Hebreos Capítulo 10:17

añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones.

Hebreos Capítulo 10:18

Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.

Hebreos Capítulo 10:19

Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo,

Hebreos Capítulo 10:20

por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne,

Hebreos Capítulo 10:21

y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de Dios,

Hebreos Capítulo 10:22

acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura.

Hebreos Capítulo 10:23

Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió.

Hebreos Capítulo 10:24

Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras;

Hebreos Capítulo 10:25

no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.

Hebreos Capítulo 10:26

Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados,

Hebreos Capítulo 10:27

sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios.

Hebreos Capítulo 10:28

El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente.

Hebreos Capítulo 10:29

¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia?

Hebreos Capítulo 10:30

Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo.

Hebreos Capítulo 10:31

¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!

Hebreos Capítulo 10:32

Pero traed a la memoria los días pasados, en los cuales, después de haber sido iluminados, sostuvisteis gran combate de padecimientos;

Hebreos Capítulo 10:33

por una parte, ciertamente, con vituperios y tribulaciones fuisteis hechos espectáculo; y por otra, llegasteis a ser compañeros de los que estaban en una situación semejante.

Hebreos Capítulo 10:34

Porque de los presos también os compadecisteis, y el despojo de vuestros bienes sufristeis con gozo, sabiendo que tenéis en vosotros una mejor y perdurable herencia en los cielos.

Hebreos Capítulo 10:35

No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón;

Hebreos Capítulo 10:36

porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa.

Hebreos Capítulo 10:37

Porque aún un poquito, Y el que ha de venir vendrá, y no tardará.

Hebreos Capítulo 10:38

Mas el justo vivirá por fe; Y si retrocediere, no agradará a mi alma.

Hebreos Capítulo 10:39

Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma.