prestar dinero a la gente
Éxodo Capítulo 22:25
Cuando prestares dinero a uno de mi pueblo, al pobre que está contigo, no te portarás con él como logrero, ni le impondrás usura.
Levítico Capítulo 25:35
Y cuando tu hermano empobreciere y se acogiere a ti, tú lo ampararás; como forastero y extranjero vivirá contigo.
Levítico Capítulo 25:36
No tomarás de él usura ni ganancia, sino tendrás temor de tu Dios, y tu hermano vivirá contigo.
Levítico Capítulo 25:37
No le darás tu dinero a usura, ni tus víveres a ganancia.
Deuteronomio Capítulo 15:7
Cuando haya en medio de ti menesteroso de alguno de tus hermanos en alguna de tus ciudades, en la tierra que Jehová tu Dios te da, no endurecerás tu corazón, ni cerrarás tu mano contra tu hermano pobre,
Deuteronomio Capítulo 23:19
No exigirás de tu hermano interés de dinero, ni interés de comestibles, ni de cosa alguna de que se suele exigir interés.
Deuteronomio Capítulo 23:20
Del extraño podrás exigir interés, mas de tu hermano no lo exigirás, para que te bendiga Jehová tu Dios en toda obra de tus manos en la tierra adonde vas para tomar posesión de ella.
Salmos Capítulo 15:5
Quien su dinero no dio a usura, Ni contra el inocente admitió cohecho. El que hace estas cosas, no resbalará jamás.
Salmos Capítulo 112:1
Bienaventurado el hombre que teme a Jehová, Y en sus mandamientos se deleita en gran manera.
Salmos Capítulo 112:2
Su descendencia será poderosa en la tierra; La generación de los rectos será bendita.
Salmos Capítulo 112:3
Bienes y riquezas hay en su casa, Y su justicia permanece para siempre.
Salmos Capítulo 112:4
Resplandeció en las tinieblas luz a los rectos; Es clemente, misericordioso y justo.
Salmos Capítulo 112:5
El hombre de bien tiene misericordia, y presta; Gobierna sus asuntos con juicio,
Salmos Capítulo 112:6
Por lo cual no resbalará jamás; En memoria eterna será el justo.
Salmos Capítulo 112:7
No tendrá temor de malas noticias; Su corazón está firme, confiado en Jehová.
Salmos Capítulo 112:8
Asegurado está su corazón; no temerá, Hasta que vea en sus enemigos su deseo.
Salmos Capítulo 112:9
Reparte, da a los pobres; Su justicia permanece para siempre; Su poder será exaltado en gloria.
Salmos Capítulo 112:10
Lo verá el impío y se irritará; Crujirá los dientes, y se consumirá. El deseo de los impíos perecerá.
Proverbios Capítulo 19:17
A Jehová presta el que da al pobre, Y el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar.
Proverbios Capítulo 22:7
El rico se enseñorea de los pobres, Y el que toma prestado es siervo del que presta.
Proverbios Capítulo 22:26
No seas de aquellos que se comprometen, Ni de los que salen por fiadores de deudas.
Proverbios Capítulo 24:1
No tengas envidia de los hombres malos, Ni desees estar con ellos;
Proverbios Capítulo 24:2
Porque su corazón piensa en robar, E iniquidad hablan sus labios.
Proverbios Capítulo 24:3
Con sabiduría se edificará la casa, Y con prudencia se afirmará;
Proverbios Capítulo 24:4
Y con ciencia se llenarán las cámaras De todo bien preciado y agradable.
Proverbios Capítulo 24:5
El hombre sabio es fuerte, Y de pujante vigor el hombre docto.
Proverbios Capítulo 24:6
Porque con ingenio harás la guerra, Y en la multitud de consejeros está la victoria.
Proverbios Capítulo 24:7
Alta está para el insensato la sabiduría; En la puerta no abrirá él su boca.
Proverbios Capítulo 24:8
Al que piensa hacer el mal, Le llamarán hombre de malos pensamientos.
Proverbios Capítulo 24:9
El pensamiento del necio es pecado, Y abominación a los hombres el escarnecedor.
Proverbios Capítulo 24:10
Si fueres flojo en el día de trabajo, Tu fuerza será reducida.
Proverbios Capítulo 24:11
Libra a los que son llevados a la muerte; Salva a los que están en peligro de muerte.
Proverbios Capítulo 24:12
Porque si dijeres: Ciertamente no lo supimos, ¿Acaso no lo entenderá el que pesa los corazones? El que mira por tu alma, él lo conocerá, Y dará al hombre según sus obras.
Proverbios Capítulo 24:13
Come, hijo mío, de la miel, porque es buena, Y el panal es dulce a tu paladar.
Proverbios Capítulo 24:14
Así será a tu alma el conocimiento de la sabiduría; Si la hallares tendrás recompensa, Y al fin tu esperanza no será cortada.
Proverbios Capítulo 24:15
Oh impío, no aceches la tienda del justo, No saquees su cámara;
Proverbios Capítulo 24:16
Porque siete veces cae el justo, y vuelve a levantarse; Mas los impíos caerán en el mal.
Proverbios Capítulo 24:17
Cuando cayere tu enemigo, no te regocijes, Y cuando tropezare, no se alegre tu corazón;
Proverbios Capítulo 24:18
No sea que Jehová lo mire, y le desagrade, Y aparte de sobre él su enojo.
Proverbios Capítulo 24:19
No te entremetas con los malignos, Ni tengas envidia de los impíos;
Proverbios Capítulo 24:20
Porque para el malo no habrá buen fin, Y la lámpara de los impíos será apagada.
Proverbios Capítulo 24:21
Teme a Jehová, hijo mío, y al rey; No te entremetas con los veleidosos;
Proverbios Capítulo 24:22
Porque su quebrantamiento vendrá de repente; Y el quebrantamiento de ambos, ¿quién lo comprende?
Proverbios Capítulo 24:23
También estos son dichos de los sabios: Hacer acepción de personas en el juicio no es bueno.
Proverbios Capítulo 24:24
El que dijere al malo: Justo eres, Los pueblos lo maldecirán, y le detestarán las naciones;
Proverbios Capítulo 24:25
Mas los que lo reprendieren tendrán felicidad, Y sobre ellos vendrá gran bendición.
Proverbios Capítulo 24:26
Besados serán los labios Del que responde palabras rectas.
Proverbios Capítulo 24:27
Prepara tus labores fuera, Y disponlas en tus campos, Y después edificarás tu casa.
Proverbios Capítulo 24:28
No seas sin causa testigo contra tu prójimo, Y no lisonjees con tus labios.
Proverbios Capítulo 24:29
No digas: Como me hizo, así le haré; Daré el pago al hombre según su obra.
Proverbios Capítulo 24:30
Pasé junto al campo del hombre perezoso, Y junto a la viña del hombre falto de entendimiento;
Proverbios Capítulo 24:31
Y he aquí que por toda ella habían crecido los espinos, Ortigas habían ya cubierto su faz, Y su cerca de piedra estaba ya destruida.
Proverbios Capítulo 24:32
Miré, y lo puse en mi corazón; Lo vi, y tomé consejo.
Proverbios Capítulo 24:33
Un poco de sueño, cabeceando otro poco, Poniendo mano sobre mano otro poco para dormir;
Proverbios Capítulo 24:34
Así vendrá como caminante tu necesidad, Y tu pobreza como hombre armado.
Proverbios Capítulo 28:8
El que aumenta sus riquezas con usura y crecido interés, Para aquel que se compadece de los pobres las aumenta.
Mateo Capítulo 5:42
Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.
Mateo Capítulo 6:1
Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos.
Mateo Capítulo 6:2
Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.
Mateo Capítulo 6:3
Mas cuando tú des limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha,
Mateo Capítulo 6:4
para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.
Mateo Capítulo 25:27
Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses.
Lucas Capítulo 6:38
Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir.
Hechos Capítulo 2:45
y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno.
Hechos Capítulo 4:34
Así que no había entre ellos ningún necesitado; porque todos los que poseían heredades o casas, las vendían, y traían el precio de lo vendido,
1 Timoteo Capítulo 6:18
Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos;
Santiago Capítulo 1:1
Santiago, siervo de Dios y del Señor Jesucristo, a las doce tribus que están en la dispersión: Salud.
Santiago Capítulo 1:2
Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas,
Santiago Capítulo 1:3
sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia.
Santiago Capítulo 1:4
Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.
Santiago Capítulo 1:5
Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.
Santiago Capítulo 1:6
Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra.
Santiago Capítulo 1:7
No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor.
Santiago Capítulo 1:8
El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos.
Santiago Capítulo 1:9
El hermano que es de humilde condición, gloríese en su exaltación;
Santiago Capítulo 1:10
pero el que es rico, en su humillación; porque él pasará como la flor de la hierba.
Santiago Capítulo 1:11
Porque cuando sale el sol con calor abrasador, la hierba se seca, su flor se cae, y perece su hermosa apariencia; así también se marchitará el rico en todas sus empresas.
Santiago Capítulo 1:12
Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.
Santiago Capítulo 1:13
Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie;
Santiago Capítulo 1:14
sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido.
Santiago Capítulo 1:15
Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte.
Santiago Capítulo 1:16
Amados hermanos míos, no erréis.
Santiago Capítulo 1:17
Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.
Santiago Capítulo 1:18
El, de su voluntad, nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que seamos primicias de sus criaturas.
Santiago Capítulo 1:19
Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse;
Santiago Capítulo 1:20
porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios.
Santiago Capítulo 1:21
Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.
Santiago Capítulo 1:22
Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.
Santiago Capítulo 1:23
Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural.
Santiago Capítulo 1:24
Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era.
Santiago Capítulo 1:25
Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
Santiago Capítulo 1:26
Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana.
Santiago Capítulo 1:27
La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.