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Algunos temas bíblicos

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prestado

Génesis Capítulo 3:19

Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.

Isaías Capítulo 43:25

Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados.

Isaías Capítulo 58:6

¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo?

Isaías Capítulo 58:7

¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu hermano?

Ezequiel Capítulo 18:21

Mas el impío, si se apartare de todos sus pecados que hizo, y guardare todos mis estatutos e hiciere según el derecho y la justicia, de cierto vivirá; no morirá.

Daniel Capítulo 9:3

Y volví mi rostro a Dios el Señor, buscándole en oración y ruego, en ayuno, cilicio y ceniza.

Joel Capítulo 2:12

Por eso pues, ahora, dice Jehová, convertíos a mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento.

Joel Capítulo 2:13

Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo.

Mateo Capítulo 4:1

Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo.

Mateo Capítulo 4:2

Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.

Mateo Capítulo 4:3

Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.

Mateo Capítulo 4:4

Él respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.

Mateo Capítulo 4:5

Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo,

Mateo Capítulo 4:6

y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, En sus manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra.

Mateo Capítulo 4:7

Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios.

Mateo Capítulo 4:8

Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos,

Mateo Capítulo 4:9

y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares.

Mateo Capítulo 4:10

Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás.

Mateo Capítulo 4:11

El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían.

Mateo Capítulo 4:12

Cuando Jesús oyó que Juan estaba preso, volvió a Galilea;

Mateo Capítulo 4:13

y dejando a Nazaret, vino y habitó en Capernaum, ciudad marítima, en la región de Zabulón y de Neftalí,

Mateo Capítulo 4:14

para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo:

Mateo Capítulo 4:15

Tierra de Zabulón y tierra de Neftalí, Camino del mar, al otro lado del Jordán, alilea de los gentiles;

Mateo Capítulo 4:16

El pueblo asentado en tinieblas vio gran luz; Y a los asentados en región de sombra de muerte, Luz les resplandeció.

Mateo Capítulo 4:17

Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.

Mateo Capítulo 4:18

Andando Jesús junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos, Simón, llamado Pedro, y Andrés su hermano, que echaban la red en el mar; porque eran pescadores.

Mateo Capítulo 4:19

Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres.

Mateo Capítulo 4:20

Ellos entonces, dejando al instante las redes, le siguieron.

Mateo Capítulo 4:21

Pasando de allí, vio a otros dos hermanos, Jacobo hijo de Zebedeo, y Juan su hermano, en la barca con Zebedeo su padre, que remendaban sus redes; y los llamó.

Mateo Capítulo 4:22

Y ellos, dejando al instante la barca y a su padre, le siguieron.

Mateo Capítulo 4:23

Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.

Mateo Capítulo 4:24

Y se difundió su fama por toda Siria; y le trajeron todos los que tenían dolencias, los afligidos por diversas enfermedades y tormentos, los endemoniados, lunáticos y paralíticos; y los sanó.

Mateo Capítulo 4:25

Y le siguió mucha gente de Galilea, de Decápolis, de Jerusalén, de Judea y del otro lado del Jordán.

Mateo Capítulo 6:1

Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos.

Mateo Capítulo 6:2

Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.

Mateo Capítulo 6:3

Mas cuando tú des limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha,

Mateo Capítulo 6:4

para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

Mateo Capítulo 6:5

Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.

Mateo Capítulo 6:6

Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

Mateo Capítulo 6:7

Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos.

Mateo Capítulo 6:8

No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.

Mateo Capítulo 6:9

Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.

Mateo Capítulo 6:10

Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.

Mateo Capítulo 6:11

El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.

Mateo Capítulo 6:12

Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores.

Mateo Capítulo 6:13

Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén.

Mateo Capítulo 6:14

Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial;

Mateo Capítulo 6:15

mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.

Mateo Capítulo 6:16

Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas; porque ellos demudan sus rostros para mostrar a los hombres que ayunan; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.

Mateo Capítulo 6:17

Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro,

Mateo Capítulo 6:18

para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

Mateo Capítulo 6:19

No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan;

Mateo Capítulo 6:20

sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan.

Mateo Capítulo 6:21

Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.

Mateo Capítulo 6:22

La lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz;

Mateo Capítulo 6:23

pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estaráen tinieblas. Así que, si la luz que en ti hay es tinieblas, ¿cuántas no serán las mismas tinieblas?

Mateo Capítulo 6:24

Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.

Mateo Capítulo 6:25

Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?

Mateo Capítulo 6:26

Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?

Mateo Capítulo 6:27

¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?

Mateo Capítulo 6:28

Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan;

Mateo Capítulo 6:29

pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos.

Mateo Capítulo 6:30

Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe?

Mateo Capítulo 6:31

No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?

Mateo Capítulo 6:32

Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.

Mateo Capítulo 6:33

Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.

Mateo Capítulo 6:34

Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.

Mateo Capítulo 9:15

Jesús les dijo: ¿Acaso pueden los que están de bodas tener luto entre tanto que el esposo está con ellos? Pero vendrán días cuando el esposo les será quitado, y entonces ayunarán.

Marcos Capítulo 1:15

diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.

Lucas Capítulo 13:3

Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.

Juan Capítulo 3:16

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Juan Capítulo 13:1

Antes de la fiesta de la pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para que pasase de este mundo al Padre, como había amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin.

Juan Capítulo 13:2

Y cuando cenaban, como el diablo ya había puesto en el corazón de Judas Iscariote, hijo de Simón, que le entregase,

Juan Capítulo 13:3

sabiendo Jesús que el Padre le había dado todas las cosas en las manos, y que había salido de Dios, y a Dios iba,

Juan Capítulo 13:4

se levantó de la cena, y se quitó su manto, y tomando una toalla, se la ciñó.

Juan Capítulo 13:5

Luego puso agua en un lebrillo, y comenzó a lavar los pies de los discípulos, y a enjugarlos con la toalla con que estaba ceñido.

Juan Capítulo 13:6

Entonces vino a Simón Pedro; y Pedro le dijo: Señor, ¿tú me lavas los pies?

Juan Capítulo 13:7

Respondió Jesús y le dijo: Lo que yo hago, tú no lo comprendes ahora; mas lo entenderás después.

Juan Capítulo 13:8

Pedro le dijo: No me lavarás los pies jamás. Jesús le respondió: Si no te lavare, no tendrás parte conmigo.

Juan Capítulo 13:9

Le dijo Simón Pedro: Señor, no sólo mis pies, sino también las manos y la cabeza.

Juan Capítulo 13:10

Jesús le dijo: El que está lavado, no necesita sino lavarse los pies, pues está todo limpio; y vosotros limpios estáis, aunque no todos.

Juan Capítulo 13:11

Porque sabía quién le iba a entregar; por eso dijo: No estáis limpios todos.

Juan Capítulo 13:12

Así que, después que les hubo lavado los pies, tomó su manto, volvió a la mesa, y les dijo: ¿Sabéis lo que os he hecho?

Juan Capítulo 13:13

Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque lo soy.

Juan Capítulo 13:14

Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.

Juan Capítulo 13:15

Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.

Juan Capítulo 13:16

De cierto, de cierto os digo: El siervo no es mayor que su señor, ni el enviado es mayor que el que le envió.

Juan Capítulo 13:17

Si sabéis estas cosas, bienaventurados seréis si las hiciereis.

Hechos Capítulo 15:9

y ninguna diferencia hizo entre nosotros y ellos, purificando por la fe sus corazones.

Colosenses Capítulo 2:16

Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo,

Colosenses Capítulo 2:17

todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo.

1 Timoteo Capítulo 4:1

Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios;

1 Timoteo Capítulo 4:2

por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia,

1 Timoteo Capítulo 4:3

prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad.

1 Timoteo Capítulo 4:4

Porque todo lo que Dios creó es bueno, y nada es de desecharse, si se toma con acción de gracias;

1 Timoteo Capítulo 4:5

porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado.

1 Pedro Capítulo 1:3

Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,

1 Pedro Capítulo 5:6

Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo;