Optional sidebar menu
Social media
Contact information
Address

5th Avenue, New York - United States

Email

hello@webpixels.ro

Phone

+10 724 1234 567

 

Algunos temas bíblicos

A     B     C     D     E     F     G     H     I     J     K     L     M     N     O     P     Q     R     S     T     U     V     W     X     Y     Z    
J ... / Juan siendo el autor del evangelio de Juan.

Juan siendo el autor del evangelio de Juan.

Juan Capítulo 1:1

En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.

Juan Capítulo 1:2

Este era en el principio con Dios.

Juan Capítulo 1:3

Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.

Juan Capítulo 1:4

En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.

Juan Capítulo 1:5

La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.

Juan Capítulo 1:6

Hubo un hombre enviado de Dios, el cual se llamaba Juan.

Juan Capítulo 1:7

Este vino por testimonio, para que diese testimonio de la luz, a fin de que todos creyesen por él.

Juan Capítulo 1:8

No era él la luz, sino para que diese testimonio de la luz.

Juan Capítulo 1:9

Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo.

Juan Capítulo 1:10

En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció.

Juan Capítulo 1:11

A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.

Juan Capítulo 1:12

Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;

Juan Capítulo 1:13

los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.

Juan Capítulo 1:14

Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.

Juan Capítulo 1:15

Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo.

Juan Capítulo 1:16

Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia.

Juan Capítulo 1:17

Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo.

Juan Capítulo 1:18

A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.

Juan Capítulo 1:19

Este es el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron de Jerusalén sacerdotes y levitas para que le preguntasen: ¿Tú, quién eres?

Juan Capítulo 1:20

Confesó, y no negó, sino confesó: Yo no soy el Cristo.

Juan Capítulo 1:21

Y le preguntaron: ¿Qué pues? ¿Eres tú Elías? Dijo: No soy. ¿Eres tú el profeta? Y respondió: No.

Juan Capítulo 1:22

Le dijeron: ¿Pues quién eres? para que demos respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo?

Juan Capítulo 1:23

Dijo: Yo soy la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor, como dijo el profeta Isaías.

Juan Capítulo 1:24

Y los que habían sido enviados eran de los fariseos.

Juan Capítulo 1:25

Y le preguntaron, y le dijeron: ¿Por qué, pues, bautizas, si tú no eres el Cristo, ni Elías, ni el profeta?

Juan Capítulo 1:26

Juan les respondió diciendo: Yo bautizo con agua; mas en medio de vosotros está uno a quien vosotros no conocéis.

Juan Capítulo 1:27

Este es el que viene después de mí, el que es antes de mí, del cual yo no soy digno de desatar la correa del calzado.

Juan Capítulo 1:28

Estas cosas sucedieron en Betábara, al otro lado del Jordán, donde Juan estaba bautizando.

Juan Capítulo 1:29

El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.

Juan Capítulo 1:30

Este es aquel de quien yo dije: Después de mí viene un varón, el cual es antes de mí; porque era primero que yo.

Juan Capítulo 1:31

Y yo no le conocía; mas para que fuese manifestado a Israel, por esto vine yo bautizando con agua.

Juan Capítulo 1:32

También dio Juan testimonio, diciendo: Vi al Espíritu que descendía del cielo como paloma, y permaneció sobre él.

Juan Capítulo 1:33

Y yo no le conocía; pero el que me envió a bautizar con agua, aquél me dijo: Sobre quien veas descender el Espíritu y que permanece sobre él, ése es el que bautiza con el Espíritu Santo.

Juan Capítulo 1:34

Y yo le vi, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios.

Juan Capítulo 1:35

El siguiente día otra vez estaba Juan, y dos de sus discípulos.

Juan Capítulo 1:36

Y mirando a Jesús que andaba por allí, dijo: He aquí el Cordero de Dios.

Juan Capítulo 1:37

Le oyeron hablar los dos discípulos, y siguieron a Jesús.

Juan Capítulo 1:38

Y volviéndose Jesús, y viendo que le seguían, les dijo: ¿Qué buscáis? Ellos le dijeron: Rabí (que traducido es, Maestro), ¿dónde moras?

Juan Capítulo 1:39

Les dijo: Venid y ved. Fueron, y vieron donde moraba, y se quedaron con él aquel día; porque era como la hora décima.

Juan Capítulo 1:40

Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que habían oído a Juan, y habían seguido a Jesús.

Juan Capítulo 1:41

Este halló primero a su hermano Simón, y le dijo: Hemos hallado al Mesías (que traducido es, el Cristo).

Juan Capítulo 1:42

Y le trajo a Jesús. Y mirándole Jesús, dijo: Tú eres Simón, hijo de Jonás; tú serás llamado Cefas (que quiere decir, Pedro).

Juan Capítulo 1:43

El siguiente día quiso Jesús ir a Galilea, y halló a Felipe, y le dijo: Sígueme.

Juan Capítulo 1:44

Y Felipe era de Betsaida, la ciudad de Andrés y Pedro.

Juan Capítulo 1:45

Felipe halló a Natanael, y le dijo: Hemos hallado a aquel de quien escribió Moisés en la ley, así como los profetas: a Jesús, el hijo de José, de Nazaret.

Juan Capítulo 1:46

Natanael le dijo: ¿De Nazaret puede salir algo de bueno? Le dijo Felipe: Ven y ve.

Juan Capítulo 1:47

Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño.

Juan Capítulo 1:48

Le dijo Natanael: ¿De dónde me conoces? Respondió Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.

Juan Capítulo 1:49

Respondió Natanael y le dijo: Rabí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel.

Juan Capítulo 1:50

Respondió Jesús y le dijo: ¿Porque te dije: Te vi debajo de la higuera, crees? Cosas mayores que estas verás.

Juan Capítulo 1:51

Y le dijo: De cierto, de cierto os digo: De aquí adelante veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre.

Juan Capítulo 3:4

Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer?

Juan Capítulo 3:16

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Juan Capítulo 5:1

Después de estas cosas había una fiesta de los judíos, y subió Jesús a Jerusalén.

Juan Capítulo 5:2

Y hay en Jerusalén, cerca de la puerta de las ovejas, un estanque, llamado en hebreo Betesda, el cual tiene cinco pórticos.

Juan Capítulo 5:3

En éstos yacía una multitud de enfermos, ciegos, cojos y paralíticos, que esperaban el movimiento del agua.

Juan Capítulo 5:4

Porque un ángel descendía de tiempo en tiempo al estanque, y agitaba el agua; y el que primero descendía al estanque después del movimiento del agua, quedaba sano de cualquier enfermedad que tuviese.

Juan Capítulo 5:5

Y había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo.

Juan Capítulo 5:6

Cuando Jesús lo vio acostado, y supo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: ¿Quieres ser sano?

Juan Capítulo 5:7

Señor, le respondió el enfermo, no tengo quien me meta en el estanque cuando se agita el agua; y entre tanto que yo voy, otro desciende antes que yo.

Juan Capítulo 5:8

Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, y anda.

Juan Capítulo 5:9

Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Y era día de reposo aquel día.

Juan Capítulo 5:10

Entonces los judíos dijeron a aquel que había sido sanado: Es día de reposo; no te es lícito llevar tu lecho.

Juan Capítulo 5:11

El les respondió: El que me sanó, él mismo me dijo: Toma tu lecho y anda.

Juan Capítulo 5:12

Entonces le preguntaron: ¿Quién es el que te dijo: Toma tu lecho y anda?

Juan Capítulo 5:13

Y el que había sido sanado no sabía quién fuese, porque Jesús se había apartado de la gente que estaba en aquel lugar.

Juan Capítulo 5:14

Después le halló Jesús en el templo, y le dijo: Mira, has sido sanado; no peques más, para que no te venga alguna cosa peor.

Juan Capítulo 5:15

El hombre se fue, y dio aviso a los judíos, que Jesús era el que le había sanado.

Juan Capítulo 5:16

Y por esta causa los judíos perseguían a Jesús, y procuraban matarle, porque hacía estas cosas en el día de reposo.

Juan Capítulo 5:17

Y Jesús les respondió: Mi Padre hasta ahora trabaja, y yo trabajo.

Juan Capítulo 5:18

Por esto los judíos aun más procuraban matarle, porque no sólo quebrantaba el día de reposo, sino que también decía que Dios era su propio Padre, haciéndose igual a Dios.

Juan Capítulo 5:19

Respondió entonces Jesús, y les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente.

Juan Capítulo 5:20

Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que él hace; y mayores obras que estas le mostrará, de modo que vosotros os maravilléis.

Juan Capítulo 5:21

Porque como el Padre levanta a los muertos, y les da vida, así también el Hijo a los que quiere da vida.

Juan Capítulo 5:22

Porque el Padre a nadie juzga, sino que todo el juicio dio al Hijo,

Juan Capítulo 5:23

para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que le envió.

Juan Capítulo 5:24

De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.

Juan Capítulo 5:25

De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que la oyeren vivirán.

Juan Capítulo 5:26

Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha dado al Hijo el tener vida en sí mismo;

Juan Capítulo 5:27

y también le dio autoridad de hacer juicio, por cuanto es el Hijo del Hombre.

Juan Capítulo 5:28

No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz;

Juan Capítulo 5:29

y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.

Juan Capítulo 5:30

No puedo yo hacer nada por mí mismo; según oigo, así juzgo; y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió, la del Padre.

Juan Capítulo 5:31

Si yo doy testimonio acerca de mí mismo, mi testimonio no es verdadero.

Juan Capítulo 5:32

Otro es el que da testimonio acerca de mí, y sé que el testimonio que da de mí es verdadero.

Juan Capítulo 5:33

Vosotros enviasteis mensajeros a Juan, y él dio testimonio de la verdad.

Juan Capítulo 5:34

Pero yo no recibo testimonio de hombre alguno; mas digo esto, para que vosotros seáis salvos.

Juan Capítulo 5:35

El era antorcha que ardía y alumbraba; y vosotros quisisteis regocijaros por un tiempo en su luz.

Juan Capítulo 5:36

Mas yo tengo mayor testimonio que el de Juan; porque las obras que el Padre me dio para que cumpliese, las mismas obras que yo hago, dan testimonio de mí, que el Padre me ha enviado.

Juan Capítulo 5:37

También el Padre que me envió ha dado testimonio de mí. Nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su aspecto,

Juan Capítulo 5:38

ni tenéis su palabra morando en vosotros; porque a quien él envió, vosotros no creéis.

Juan Capítulo 5:39

Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;

Juan Capítulo 5:40

y no queréis venir a mí para que tengáis vida.

Juan Capítulo 5:41

Gloria de los hombres no recibo.

Juan Capítulo 5:42

Mas yo os conozco, que no tenéis amor de Dios en vosotros.

Juan Capítulo 5:43

Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me recibís; si otro viniere en su propio nombre, a ése recibiréis.

Juan Capítulo 5:44

¿Cómo podéis vosotros creer, pues recibís gloria los unos de los otros, y no buscáis la gloria que viene del Dios único?

Juan Capítulo 5:45

No penséis que yo voy a acusaros delante del Padre; hay quien os acusa, Moisés, en quien tenéis vuestra esperanza.

Juan Capítulo 5:46

Porque si creyeseis a Moisés, me creeríais a mí, porque de mí escribió él.

Juan Capítulo 5:47

Pero si no creéis a sus escritos, ¿cómo creeréis a mis palabras?

Juan Capítulo 8:1

y Jesús se fue al monte de los Olivos.

Juan Capítulo 8:2

Y por la mañana volvió al templo, y todo el pueblo vino a él; y sentado él, les enseñaba.

Juan Capítulo 8:3

Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio,

Juan Capítulo 8:4

le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio.

Juan Capítulo 8:5

Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices?

Juan Capítulo 8:6

Mas esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia el suelo, escribía en tierra con el dedo.

Juan Capítulo 8:7

Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella.

Juan Capítulo 8:8

E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra.

Juan Capítulo 8:9

Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.

Juan Capítulo 8:10

Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?

Juan Capítulo 8:11

Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.

Juan Capítulo 8:12

Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.

Juan Capítulo 8:13

Entonces los fariseos le dijeron: Tú das testimonio acerca de ti mismo; tu testimonio no es verdadero.

Juan Capítulo 8:14

Respondió Jesús y les dijo: Aunque yo doy testimonio acerca de mí mismo, mi testimonio es verdadero, porque sé de dónde he venido y a dónde voy; pero vosotros no sabéis de dónde vengo, ni a dónde voy.

Juan Capítulo 8:15

Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a nadie.

Juan Capítulo 8:16

Y si yo juzgo, mi juicio es verdadero; porque no soy yo solo, sino yo y el que me envió, el Padre.

Juan Capítulo 8:17

Y en vuestra ley está escrito que el testimonio de dos hombres es verdadero.

Juan Capítulo 8:18

Yo soy el que doy testimonio de mí mismo, y el Padre que me envió da testimonio de mí.

Juan Capítulo 8:19

Ellos le dijeron: ¿Dónde está tu Padre? Respondió Jesús: Ni a mí me conocéis, ni a mi Padre; si a mí me conocieseis, también a mi Padre conoceríais.

Juan Capítulo 8:20

Estas palabras habló Jesús en el lugar de las ofrendas, enseñando en el templo; y nadie le prendió, porque aún no había llegado su hora.

Juan Capítulo 8:21

Otra vez les dijo Jesús: Yo me voy, y me buscaréis, pero en vuestro pecado moriréis; a donde yo voy, vosotros no podéis venir.

Juan Capítulo 8:22

Decían entonces los judíos: ¿Acaso se matará a sí mismo, que dice: A donde yo voy, vosotros no podéis venir?

Juan Capítulo 8:23

Y les dijo: Vosotros sois de abajo, yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo.

Juan Capítulo 8:24

Por eso os dije que moriréis en vuestros pecados; porque si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis.

Juan Capítulo 8:25

Entonces le dijeron: ¿Tú quién eres? Entonces Jesús les dijo: Lo que desde el principio os he dicho.

Juan Capítulo 8:26

Muchas cosas tengo que decir y juzgar de vosotros; pero el que me envió es verdadero; y yo, lo que he oído de él, esto hablo al mundo.

Juan Capítulo 8:27

Pero no entendieron que les hablaba del Padre.

Juan Capítulo 8:28

Les dijo, pues, Jesús: Cuando hayáis levantado al Hijo del Hombre, entonces conoceréis que yo soy, y que nada hago por mí mismo, sino que según me enseñó el Padre, así hablo.

Juan Capítulo 8:29

Porque el que me envió, conmigo está; no me ha dejado solo el Padre, porque yo hago siempre lo que le agrada.

Juan Capítulo 8:30

Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él.

Juan Capítulo 8:31

Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;

Juan Capítulo 8:32

y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.

Juan Capítulo 8:33

Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres?

Juan Capítulo 8:34

Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Juan Capítulo 8:35

Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo sí queda para siempre.

Juan Capítulo 8:36

Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.

Juan Capítulo 8:37

Sé que sois descendientes de Abraham; pero procuráis matarme, porque mi palabra no halla cabida en vosotros.

Juan Capítulo 8:38

Yo hablo lo que he visto cerca del Padre; y vosotros hacéis lo que habéis oído cerca de vuestro padre.

Juan Capítulo 8:39

Respondieron y le dijeron: Nuestro padre es Abraham. Jesús les dijo: Si fueseis hijos de Abraham, las obras de Abraham haríais.

Juan Capítulo 8:40

Pero ahora procuráis matarme a mí, hombre que os he hablado la verdad, la cual he oído de Dios; no hizo esto Abraham.

Juan Capítulo 8:41

Vosotros hacéis las obras de vuestro padre. Entonces le dijeron: Nosotros no somos nacidos de fornicación; un padre tenemos, que es Dios.

Juan Capítulo 8:42

Jesús entonces les dijo: Si vuestro padre fuese Dios, ciertamente me amaríais; porque yo de Dios he salido, y he venido; pues no he venido de mí mismo, sino que él me envió.

Juan Capítulo 8:43

¿Por qué no entendéis mi lenguaje? Porque no podéis escuchar mi palabra.

Juan Capítulo 8:44

Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.

Juan Capítulo 8:45

Y a mí, porque digo la verdad, no me creéis.

Juan Capítulo 8:46

¿Quién de vosotros me redarguye de pecado? Pues si digo la verdad, ¿por qué vosotros no me creéis?

Juan Capítulo 8:47

El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por esto no las oís vosotros, porque no sois de Dios.

Juan Capítulo 8:48

Respondieron entonces los judíos, y le dijeron: ¿No decimos bien nosotros, que tú eres samaritano, y que tienes demonio?

Juan Capítulo 8:49

Respondió Jesús: Yo no tengo demonio, antes honro a mi Padre; y vosotros me deshonráis.

Juan Capítulo 8:50

Pero yo no busco mi gloria; hay quien la busca, y juzga.

Juan Capítulo 8:51

De cierto, de cierto os digo, que el que guarda mi palabra, nunca verá muerte.

Juan Capítulo 8:52

Entonces los judíos le dijeron: Ahora conocemos que tienes demonio. Abraham murió, y los profetas; y tú dices: El que guarda mi palabra, nunca sufrirá muerte.

Juan Capítulo 8:53

¿Eres tú acaso mayor que nuestro padre Abraham, el cual murió? ¡Y los profetas murieron! ¿Quién te haces a ti mismo?

Juan Capítulo 8:54

Respondió Jesús: Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria nada es; mi Padre es el que me glorifica, el que vosotros decís que es vuestro Dios.

Juan Capítulo 8:55

Pero vosotros no le conocéis; mas yo le conozco, y si dijere que no le conozco, sería mentiroso como vosotros; pero le conozco, y guardo su palabra.

Juan Capítulo 8:56

Abraham vuestro padre se gozó de que había de ver mi día; y lo vio, y se gozó.

Juan Capítulo 8:57

Entonces le dijeron los judíos: Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham?

Juan Capítulo 8:58

Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy.

Juan Capítulo 8:59

Tomaron entonces piedras para arrojárselas; pero Jesús se escondió y salió del templo; y atravesando por en medio de ellos, se fue.

Juan Capítulo 12:1

Seis días antes de la pascua, vino Jesús a Betania, donde estaba Lázaro, el que había estado muerto, y a quien había resucitado de los muertos.

Juan Capítulo 12:2

Y le hicieron allí una cena; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban sentados a la mesa con él.

Juan Capítulo 12:3

Entonces María tomó una libra de perfume de nardo puro, de mucho precio, y ungió los pies de Jesús, y los enjugó con sus cabellos; y la casa se llenó del olor del perfume.

Juan Capítulo 12:4

Y dijo uno de sus discípulos, Judas Iscariote hijo de Simón, el que le había de entregar:

Juan Capítulo 12:5

¿Por qué no fue este perfume vendido por trescientos denarios, y dado a los pobres?

Juan Capítulo 12:6

Pero dijo esto, no porque se cuidara de los pobres, sino porque era ladrón, y teniendo la bolsa, sustraía de lo que se echaba en ella.

Juan Capítulo 12:7

Entonces Jesús dijo: Déjala; para el día de mi sepultura ha guardado esto.

Juan Capítulo 12:8

Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros, mas a mí no siempre me tendréis.

Juan Capítulo 12:9

Gran multitud de los judíos supieron entonces que él estaba allí, y vinieron, no solamente por causa de Jesús, sino también para ver a Lázaro, a quien había resucitado de los muertos.

Juan Capítulo 12:10

Pero los principales sacerdotes acordaron dar muerte también a Lázaro,

Juan Capítulo 12:11

porque a causa de él muchos de los judíos se apartaban y creían en Jesús.

Juan Capítulo 12:12

El siguiente día, grandes multitudes que habían venido a la fiesta, al oír que Jesús venía a Jerusalén,

Juan Capítulo 12:13

tomaron ramas de palmera y salieron a recibirle, y clamaban: ¡Hosanna!¡Bendito el que viene en el nombre del Señor, el Rey de Israel!

Juan Capítulo 12:14

Y halló Jesús un asnillo, y montó sobre él, como está escrito:

Juan Capítulo 12:15

No temas, hija de Sion; He aquí tu Rey viene, Montado sobre un pollino de asna.

Juan Capítulo 12:16

Estas cosas no las entendieron sus discípulos al principio; pero cuando Jesús fue glorificado, entonces se acordaron de que estas cosas estaban escritas acerca de él, y de que se las habían hecho.

Juan Capítulo 12:17

Y daba testimonio la gente que estaba con él cuando llamó a Lázaro del sepulcro, y le resucitó de los muertos.

Juan Capítulo 12:18

Por lo cual también había venido la gente a recibirle, porque había oído que él había hecho esta señal.

Juan Capítulo 12:19

Pero los fariseos dijeron entre sí: Ya veis que no conseguís nada. Mirad, el mundo se va tras él.

Juan Capítulo 12:20

Había ciertos griegos entre los que habían subido a adorar en la fiesta.

Juan Capítulo 12:21

Estos, pues, se acercaron a Felipe, que era de Betsaida de Galilea, y le rogaron, diciendo: Señor, quisiéramos ver a Jesús.

Juan Capítulo 12:22

Felipe fue y se lo dijo a Andrés; entonces Andrés y Felipe se lo dijeron a Jesús.

Juan Capítulo 12:23

Jesús les respondió diciendo: Ha llegado la hora para que el Hijo del Hombre sea glorificado.

Juan Capítulo 12:24

De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.

Juan Capítulo 12:25

El que ama su vida, la perderá; y el que aborrece su vida en este mundo, para vida eterna la guardará.

Juan Capítulo 12:26

Si alguno me sirve, sígame; y donde yo estuviere, allí también estará mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará.

Juan Capítulo 12:27

Ahora está turbada mi alma; ¿y qué diré? ¿Padre, sálvame de esta hora? Mas para esto he llegado a esta hora.

Juan Capítulo 12:28

Padre, glorifica tu nombre. Entonces vino una voz del cielo: Lo he glorificado, y lo glorificaré otra vez.

Juan Capítulo 12:29

Y la multitud que estaba allí, y había oído la voz, decía que había sido un trueno. Otros decían: Un ángel le ha hablado.

Juan Capítulo 12:30

Respondió Jesús y dijo: No ha venido esta voz por causa mía, sino por causa de vosotros.

Juan Capítulo 12:31

Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera.

Juan Capítulo 12:32

Y yo, si fuere levantado de la tierra, a todos atraeré a mí mismo.

Juan Capítulo 12:33

Y decía esto dando a entender de qué muerte iba a morir.

Juan Capítulo 12:34

Le respondió la gente: Nosotros hemos oído de la ley, que el Cristo permanece para siempre. ¿Cómo, pues, dices tú que es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado? ¿Quién es este Hijo del Hombre?

Juan Capítulo 12:35

Entonces Jesús les dijo: Aún por un poco está la luz entre vosotros; andad entre tanto que tenéis luz, para que no os sorprendan las tinieblas; porque el que anda en tinieblas, no sabe a dónde va.

Juan Capítulo 12:36

Entre tanto que tenéis la luz, creed en la luz, para que seáis hijos de luz.

Juan Capítulo 12:37

Pero a pesar de que había hecho tantas señales delante de ellos, no creían en él;

Juan Capítulo 12:38

para que se cumpliese la palabra del profeta Isaías, que dijo: Señor, ¿quién ha creído a nuestro anuncio? ¿Y a quién se ha revelado el brazo del Señor?

Juan Capítulo 12:39

Por esto no podían creer, porque también dijo Isaías:

Juan Capítulo 12:40

Cegó los ojos de ellos, y endureció su corazón; Para que no vean con los ojos, y entiendan con el corazón, Y se conviertan y yo los sane.

Juan Capítulo 12:41

Isaías dijo esto cuando vio su gloria, y habló acerca de él.

Juan Capítulo 12:42

Con todo eso, aun de los gobernantes, muchos creyeron en él; pero a causa de los fariseos no lo confesaban, para no ser expulsados de la sinagoga.

Juan Capítulo 12:43

Porque amaban más la gloria de los hombres que la gloria de Dios.

Juan Capítulo 12:44

Jesús clamó y dijo: El que cree en mí, no cree en mí, sino en el que me envió;

Juan Capítulo 12:45

y el que me ve, ve al que me envió.

Juan Capítulo 12:46

Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas.

Juan Capítulo 12:47

Al que oye mis palabras, y no las guarda, yo no le juzgo; porque no he venido a juzgar al mundo, sino a salvar al mundo.

Juan Capítulo 12:48

El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.

Juan Capítulo 12:49

Porque yo no he hablado por mi propia cuenta; el Padre que me envió, él me dio mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de hablar.

Juan Capítulo 12:50

Y sé que su mandamiento es vida eterna. Así pues, lo que yo hablo, lo hablo como el Padre me lo ha dicho.

Juan Capítulo 14:1

No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.

Juan Capítulo 14:2

En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.

Juan Capítulo 14:3

Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.

Juan Capítulo 14:4

Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino.

Juan Capítulo 14:5

Le dijo Tomás: Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo, pues, podemos saber el camino?

Juan Capítulo 14:6

Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

Juan Capítulo 14:7

Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.

Juan Capítulo 14:8

Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta.

Juan Capítulo 14:9

Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?

Juan Capítulo 14:10

¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras.

Juan Capítulo 14:11

Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras.

Juan Capítulo 14:12

De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre.

Juan Capítulo 14:13

Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.

Juan Capítulo 14:14

Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.

Juan Capítulo 14:15

Si me amáis, guardad mis mandamientos.

Juan Capítulo 14:16

Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:

Juan Capítulo 14:17

el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.

Juan Capítulo 14:18

No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.

Juan Capítulo 14:19

Todavía un poco, y el mundo no me verá más; pero vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis.

Juan Capítulo 14:20

En aquel día vosotros conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.

Juan Capítulo 14:21

El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él.

Juan Capítulo 14:22

Le dijo Judas (no el Iscariote): Señor, ¿cómo es que te manifestarás a nosotros, y no al mundo?

Juan Capítulo 14:23

Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él.

Juan Capítulo 14:24

El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.

Juan Capítulo 14:25

Os he dicho estas cosas estando con vosotros.

Juan Capítulo 14:26

Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.

Juan Capítulo 14:27

La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.

Juan Capítulo 14:28

Habéis oído que yo os he dicho: Voy, y vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre mayor es que yo.

Juan Capítulo 14:29

Y ahora os lo he dicho antes que suceda, para que cuando suceda, creáis.

Juan Capítulo 14:30

No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí.

Juan Capítulo 14:31

Mas para que el mundo conozca que amo al Padre, y como el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vamos de aquí.

Juan Capítulo 17:20

Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos,

Juan Capítulo 17:21

para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.

Juan Capítulo 17:22

La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno.

Juan Capítulo 17:23

Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado.

Juan Capítulo 17:24

Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, también ellos estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación del mundo.

Juan Capítulo 17:25

Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te he conocido, y éstos han conocido que tú me enviaste.

Juan Capítulo 17:26

Y les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos.

Juan Capítulo 19:26

Cuando vio Jesús a su madre, y al discípulo a quien él amaba, que estaba presente, dijo a su madre: Mujer, he ahí tu hijo.

Juan Capítulo 20:31

Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.

Juan Capítulo 21:24

Este es el discípulo que da testimonio de estas cosas, y escribió estas cosas; y sabemos que su testimonio es verdadero.

Hebreos Capítulo 11:1

Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.

Hebreos Capítulo 11:2

Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos.

Hebreos Capítulo 11:3

Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.

Hebreos Capítulo 11:4

Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella.

Hebreos Capítulo 11:5

Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios.

Hebreos Capítulo 11:6

Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.

Hebreos Capítulo 11:7

Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe.

Hebreos Capítulo 11:8

Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba.

Hebreos Capítulo 11:9

Por la fe habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena, morando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa;

Hebreos Capítulo 11:10

porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios.

Hebreos Capítulo 11:11

Por la fe también la misma Sara, siendo estéril, recibió fuerza para concebir; y dio a luz aun fuera del tiempo de la edad, porque creyó que era fiel quien lo había prometido.

Hebreos Capítulo 11:12

Por lo cual también, de uno, y ése ya casi muerto, salieron como las estrellas del cielo en multitud, y como la arena innumerable que está a la orilla del mar.

Hebreos Capítulo 11:13

Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra.

Hebreos Capítulo 11:14

Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria;

Hebreos Capítulo 11:15

pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver.

Hebreos Capítulo 11:16

Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad.

Hebreos Capítulo 11:17

Por la fe Abraham, cuando fue probado, ofreció a Isaac; y el que había recibido las promesas ofrecía su unigénito,

Hebreos Capítulo 11:18

habiéndosele dicho: En Isaac te será llamada descendencia;

Hebreos Capítulo 11:19

pensando que Dios es poderoso para levantar aun de entre los muertos, de donde, en sentido figurado, también le volvió a recibir.

Hebreos Capítulo 11:20

Por la fe bendijo Isaac a Jacob y a Esaú respecto a cosas venideras.

Hebreos Capítulo 11:21

Por la fe Jacob, al morir, bendijo a cada uno de los hijos de José, y adoró apoyado sobre el extremo de su bordón.

Hebreos Capítulo 11:22

Por la fe José, al morir, mencionó la salida de los hijos de Israel, y dio mandamiento acerca de sus huesos.

Hebreos Capítulo 11:23

Por la fe Moisés, cuando nació, fue escondido por sus padres por tres meses, porque le vieron niño hermoso, y no temieron el decreto del rey.

Hebreos Capítulo 11:24

Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón,

Hebreos Capítulo 11:25

escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado,

Hebreos Capítulo 11:26

teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón.

Hebreos Capítulo 11:27

Por la fe dejó a Egipto, no temiendo la ira del rey; porque se sostuvo como viendo al Invisible.

Hebreos Capítulo 11:28

Por la fe celebró la pascua y la aspersión de la sangre, para que el que destruía a los primogénitos no los tocase a ellos.

Hebreos Capítulo 11:29

Por la fe pasaron el Mar Rojo como por tierra seca; e intentando los egipcios hacer lo mismo, fueron ahogados.

Hebreos Capítulo 11:30

Por la fe cayeron los muros de Jericó después de rodearlos siete días.

Hebreos Capítulo 11:31

Por la fe Rahab la ramera no pereció juntamente con los desobedientes, habiendo recibido a los espías en paz.

Hebreos Capítulo 11:32

¿Y qué más digo? Porque el tiempo me faltaría contando de Gedeón, de Barac, de Sansón, de Jefté, de David, así como de Samuel y de los profetas;

Hebreos Capítulo 11:33

que por fe conquistaron reinos, hicieron justicia, alcanzaron promesas, taparon bocas de leones,

Hebreos Capítulo 11:34

apagaron fuegos impetuosos, evitaron filo de espada, sacaron fuerzas de debilidad, se hicieron fuertes en batallas, pusieron en fuga ejércitos extranjeros.

Hebreos Capítulo 11:35

Las mujeres recibieron sus muertos mediante resurrección; mas otros fueron atormentados, no aceptando el rescate, a fin de obtener mejor resurrección.

Hebreos Capítulo 11:36

Otros experimentaron vituperios y azotes, y a más de esto prisiones y cárceles.

Hebreos Capítulo 11:37

Fueron apedreados, aserrados, puestos a prueba, muertos a filo de espada; anduvieron de acá para allá cubiertos de pieles de ovejas y de cabras, pobres, angustiados, maltratados;

Hebreos Capítulo 11:38

de los cuales el mundo no era digno; errando por los desiertos, por los montes, por las cuevas y por las cavernas de la tierra.

Hebreos Capítulo 11:39

Y todos éstos, aunque alcanzaron buen testimonio mediante la fe, no recibieron lo prometido;

Hebreos Capítulo 11:40

proveyendo Dios alguna cosa mejor para nosotros, para que no fuesen ellos perfeccionados aparte de nosotros.