líder familiar
Génesis Capítulo 18:19
Porque yo sé que mandará a sus hijos y a su casa después de sí, que guarden el camino de Jehová, haciendo justicia y juicio, para que haga venir Jehová sobre Abraham lo que ha hablado acerca de él.
Proverbios Capítulo 22:6
Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.
Juan Capítulo 1:1
En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
Juan Capítulo 1:2
Este era en el principio con Dios.
Juan Capítulo 1:3
Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
Juan Capítulo 1:4
En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
Juan Capítulo 1:5
La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.
Juan Capítulo 1:6
Hubo un hombre enviado de Dios, el cual se llamaba Juan.
Juan Capítulo 1:7
Este vino por testimonio, para que diese testimonio de la luz, a fin de que todos creyesen por él.
Juan Capítulo 1:8
No era él la luz, sino para que diese testimonio de la luz.
Juan Capítulo 1:9
Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo.
Juan Capítulo 1:10
En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció.
Juan Capítulo 1:11
A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.
Juan Capítulo 1:12
Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;
Juan Capítulo 1:13
los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.
Juan Capítulo 1:14
Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Juan Capítulo 1:15
Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo.
Juan Capítulo 1:16
Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia.
Juan Capítulo 1:17
Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo.
Juan Capítulo 1:18
A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.
Juan Capítulo 1:19
Este es el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron de Jerusalén sacerdotes y levitas para que le preguntasen: ¿Tú, quién eres?
Juan Capítulo 1:20
Confesó, y no negó, sino confesó: Yo no soy el Cristo.
Juan Capítulo 1:21
Y le preguntaron: ¿Qué pues? ¿Eres tú Elías? Dijo: No soy. ¿Eres tú el profeta? Y respondió: No.
Juan Capítulo 1:22
Le dijeron: ¿Pues quién eres? para que demos respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo?
Juan Capítulo 1:23
Dijo: Yo soy la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor, como dijo el profeta Isaías.
Juan Capítulo 1:24
Y los que habían sido enviados eran de los fariseos.
Juan Capítulo 1:25
Y le preguntaron, y le dijeron: ¿Por qué, pues, bautizas, si tú no eres el Cristo, ni Elías, ni el profeta?
Juan Capítulo 1:26
Juan les respondió diciendo: Yo bautizo con agua; mas en medio de vosotros está uno a quien vosotros no conocéis.
Juan Capítulo 1:27
Este es el que viene después de mí, el que es antes de mí, del cual yo no soy digno de desatar la correa del calzado.
Juan Capítulo 1:28
Estas cosas sucedieron en Betábara, al otro lado del Jordán, donde Juan estaba bautizando.
Juan Capítulo 1:29
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.
Juan Capítulo 1:30
Este es aquel de quien yo dije: Después de mí viene un varón, el cual es antes de mí; porque era primero que yo.
Juan Capítulo 1:31
Y yo no le conocía; mas para que fuese manifestado a Israel, por esto vine yo bautizando con agua.
Juan Capítulo 1:32
También dio Juan testimonio, diciendo: Vi al Espíritu que descendía del cielo como paloma, y permaneció sobre él.
Juan Capítulo 1:33
Y yo no le conocía; pero el que me envió a bautizar con agua, aquél me dijo: Sobre quien veas descender el Espíritu y que permanece sobre él, ése es el que bautiza con el Espíritu Santo.
Juan Capítulo 1:34
Y yo le vi, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios.
Juan Capítulo 1:35
El siguiente día otra vez estaba Juan, y dos de sus discípulos.
Juan Capítulo 1:36
Y mirando a Jesús que andaba por allí, dijo: He aquí el Cordero de Dios.
Juan Capítulo 1:37
Le oyeron hablar los dos discípulos, y siguieron a Jesús.
Juan Capítulo 1:38
Y volviéndose Jesús, y viendo que le seguían, les dijo: ¿Qué buscáis? Ellos le dijeron: Rabí (que traducido es, Maestro), ¿dónde moras?
Juan Capítulo 1:39
Les dijo: Venid y ved. Fueron, y vieron donde moraba, y se quedaron con él aquel día; porque era como la hora décima.
Juan Capítulo 1:40
Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que habían oído a Juan, y habían seguido a Jesús.
Juan Capítulo 1:41
Este halló primero a su hermano Simón, y le dijo: Hemos hallado al Mesías (que traducido es, el Cristo).
Juan Capítulo 1:42
Y le trajo a Jesús. Y mirándole Jesús, dijo: Tú eres Simón, hijo de Jonás; tú serás llamado Cefas (que quiere decir, Pedro).
Juan Capítulo 1:43
El siguiente día quiso Jesús ir a Galilea, y halló a Felipe, y le dijo: Sígueme.
Juan Capítulo 1:44
Y Felipe era de Betsaida, la ciudad de Andrés y Pedro.
Juan Capítulo 1:45
Felipe halló a Natanael, y le dijo: Hemos hallado a aquel de quien escribió Moisés en la ley, así como los profetas: a Jesús, el hijo de José, de Nazaret.
Juan Capítulo 1:46
Natanael le dijo: ¿De Nazaret puede salir algo de bueno? Le dijo Felipe: Ven y ve.
Juan Capítulo 1:47
Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño.
Juan Capítulo 1:48
Le dijo Natanael: ¿De dónde me conoces? Respondió Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.
Juan Capítulo 1:49
Respondió Natanael y le dijo: Rabí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel.
Juan Capítulo 1:50
Respondió Jesús y le dijo: ¿Porque te dije: Te vi debajo de la higuera, crees? Cosas mayores que estas verás.
Juan Capítulo 1:51
Y le dijo: De cierto, de cierto os digo: De aquí adelante veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre.
Efesios Capítulo 3:14
Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesucristo,
Efesios Capítulo 3:15
de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra,
Efesios Capítulo 3:16
para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu;
Efesios Capítulo 3:17
para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor,
Efesios Capítulo 3:18
seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura,
Efesios Capítulo 3:19
y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.
Efesios Capítulo 5:22
Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor;
Efesios Capítulo 5:23
porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.
Efesios Capítulo 5:24
Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo.
Efesios Capítulo 6:4
Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.
Colosenses Capítulo 1:9
Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual,
Colosenses Capítulo 1:10
para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios;
Colosenses Capítulo 1:11
fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad;
Colosenses Capítulo 1:12
con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz;
1 Timoteo Capítulo 3:5
(pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?);
1 Timoteo Capítulo 5:8
porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.
Tito Capítulo 2:1
Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina.
Tito Capítulo 2:2
Que los ancianos sean sobrios, serios, prudentes, sanos en la fe, en el amor, en la paciencia.
Tito Capítulo 2:3
Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino, maestras del bien;
Tito Capítulo 2:4
que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos,
Tito Capítulo 2:5
a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada.
Tito Capítulo 2:6
Exhorta asimismo a los jóvenes a que sean prudentes;
Tito Capítulo 2:7
presentándote tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando integridad, seriedad,
Tito Capítulo 2:8
palabra sana e irreprochable, de modo que el adversario se avergüence, y no tenga nada malo que decir de vosotros.
Tito Capítulo 2:9
Exhorta a los siervos a que se sujeten a sus amos, que agraden en todo, que no sean respondones;
Tito Capítulo 2:10
no defraudando, sino mostrándose fieles en todo, para que en todo adornen la doctrina de Dios nuestro Salvador.
Tito Capítulo 2:11
Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres,
Tito Capítulo 2:12
enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente,
Tito Capítulo 2:13
aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo,
Tito Capítulo 2:14
quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.
Tito Capítulo 2:15
Esto habla, y exhorta y reprende con toda autoridad. Nadie te menosprecie.