mujeres enojadas
Proverbios Capítulo 14:29
El que tarda en airarse es grande de entendimiento; Mas el que es impaciente de espíritu enaltece la necedad.
Proverbios Capítulo 15:1
La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor.
Proverbios Capítulo 15:18
El hombre iracundo promueve contiendas; Mas el que tarda en airarse apacigua la rencilla.
Proverbios Capítulo 17:1
Mejor es un bocado seco, y en paz, Que casa de contiendas llena de provisiones.
Proverbios Capítulo 21:9
Mejor es vivir en un rincón del terrado Que con mujer rencillosa en casa espaciosa.
Proverbios Capítulo 21:19
Mejor es morar en tierra desierta Que con la mujer rencillosa e iracunda.
Proverbios Capítulo 25:24
Mejor es estar en un rincón del terrado, Que con mujer rencillosa en casa espaciosa.
Proverbios Capítulo 27:15
Gotera continua en tiempo de lluvia Y la mujer rencillosa, son semejantes;
Proverbios Capítulo 29:11
El necio da rienda suelta a toda su ira, Mas el sabio al fin la sosiega.
Romanos Capítulo 12:19
No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.
1 Corintios Capítulo 13:1
Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe.
1 Corintios Capítulo 13:2
Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.
1 Corintios Capítulo 13:3
Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve.
1 Corintios Capítulo 13:4
El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece;
1 Corintios Capítulo 13:5
no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor;
1 Corintios Capítulo 13:6
no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad.
1 Corintios Capítulo 13:7
Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
1 Corintios Capítulo 13:8
El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.
1 Corintios Capítulo 13:9
Porque en parte conocemos, y en parte profetizamos;
1 Corintios Capítulo 13:10
mas cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará.
1 Corintios Capítulo 13:11
Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; mas cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño.
1 Corintios Capítulo 13:12
Ahora vemos por espejo, oscuramente; mas entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte; pero entonces conoceré como fui conocido.
1 Corintios Capítulo 13:13
Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor.
Efesios Capítulo 4:26
Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo,
Efesios Capítulo 4:27
ni deis lugar al diablo.
Efesios Capítulo 5:22
Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor;
Colosenses Capítulo 3:8
Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.
Tito Capítulo 2:3
Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino, maestras del bien;
Tito Capítulo 2:4
que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos,
Tito Capítulo 2:5
a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada.
Santiago Capítulo 1:19
Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse;
Santiago Capítulo 1:20
porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios.
1 Pedro Capítulo 3:1
Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas,
1 Pedro Capítulo 3:2
considerando vuestra conducta casta y respetuosa.
1 Pedro Capítulo 3:3
Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos,
1 Pedro Capítulo 3:4
sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible, que es de grande estima delante de Dios.
1 Pedro Capítulo 3:5
Porque así también se ataviaban en otro tiempo aquellas santas mujeres que esperaban en Dios, estando sujetas a sus maridos;
1 Pedro Capítulo 3:6
como Sara obedecía a Abraham, llamándole señor; de la cual vosotras habéis venido a ser hijas, si hacéis el bien, sin temer ninguna amenaza.