objetores de conciencia
Isaías Capítulo 9:6
Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
Miqueas Capítulo 4:3
Y él juzgará entre muchos pueblos, y corregirá a naciones poderosas hasta muy lejos; y martillarán sus espadas para azadones, y sus lanzas para hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se ensayarán más para la guerra.
Mateo Capítulo 5:1
Viendo la multitud, subió al monte; y sentándose, vinieron a él sus discípulos.
Mateo Capítulo 5:2
Y abriendo su boca les enseñaba, diciendo:
Mateo Capítulo 5:3
Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
Mateo Capítulo 5:4
Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación.
Mateo Capítulo 5:5
Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.
Mateo Capítulo 5:6
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
Mateo Capítulo 5:7
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
Mateo Capítulo 5:8
Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
Mateo Capítulo 5:9
Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Mateo Capítulo 5:10
Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
Mateo Capítulo 5:11
Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.
Mateo Capítulo 5:12
Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.
Mateo Capítulo 5:13
Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.
Mateo Capítulo 5:14
Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder.
Mateo Capítulo 5:15
Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa.
Mateo Capítulo 5:16
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que están los cielos.
Mateo Capítulo 5:17
No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir.
Mateo Capítulo 5:18
Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido.
Mateo Capítulo 5:19
De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos.
Mateo Capítulo 5:20
Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.
Mateo Capítulo 5:21
Oísteis que fue dicho a los antiguos: No matarás; y cualquiera que matare será culpable de juicio.
Mateo Capítulo 5:22
Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego.
Mateo Capítulo 5:23
Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti,
Mateo Capítulo 5:24
deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda.
Mateo Capítulo 5:25
Ponte de acuerdo con tu adversario pronto, entre tanto que estás con él en el camino, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil, y seas echado en la cárcel.
Mateo Capítulo 5:26
De cierto te digo que no saldrás de allí, hasta que pagues el último cuadrante.
Mateo Capítulo 5:27
Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio.
Mateo Capítulo 5:28
Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.
Mateo Capítulo 5:29
Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.
Mateo Capítulo 5:30
Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.
Mateo Capítulo 5:31
También fue dicho: Cualquiera que repudie a su mujer, dele carta de divorcio.
Mateo Capítulo 5:32
Pero yo os digo que el que repudia a su mujer, a no ser por causa de fornicación, hace que ella adultere; y el que se casa con la repudiada, comete adulterio.
Mateo Capítulo 5:33
Además habéis oído que fue dicho a los antiguos: No perjurarás, sino cumplirás al Señor tus juramentos.
Mateo Capítulo 5:34
Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios;
Mateo Capítulo 5:35
ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey.
Mateo Capítulo 5:36
Ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello.
Mateo Capítulo 5:37
Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más de esto, de mal procede.
Mateo Capítulo 5:38
Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente.
Mateo Capítulo 5:39
Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra;
Mateo Capítulo 5:40
y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa;
Mateo Capítulo 5:41
y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, vecon él dos.
Mateo Capítulo 5:42
Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.
Mateo Capítulo 5:43
Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo.
Mateo Capítulo 5:44
Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;
Mateo Capítulo 5:45
para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.
Mateo Capítulo 5:46
Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos?
Mateo Capítulo 5:47
Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles?
Mateo Capítulo 5:48
Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.
Mateo Capítulo 24:6
Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin.
Mateo Capítulo 26:52
Entonces Jesús le dijo: Vuelve tu espada a su lugar; porque todos los que tomen espada, a espada perecerán.
Lucas Capítulo 3:14
También le preguntaron unos soldados, diciendo: Y nosotros, ¿qué haremos? Y les dijo: No hagáis extorsión a nadie, ni calumniéis; y contentaos con vuestro salario.
Juan Capítulo 3:16
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
Juan Capítulo 3:17
Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.
Juan Capítulo 14:6
Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
Juan Capítulo 14:15
Si me amáis, guardad mis mandamientos.
Juan Capítulo 18:36
Respondió Jesús: Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi reino no es de aquí.
Hechos Capítulo 2:38
Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.
Romanos Capítulo 1:16
Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.
Romanos Capítulo 12:2
No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Romanos Capítulo 13:1
Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas.
Romanos Capítulo 13:2
De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos.
Romanos Capítulo 13:3
Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella;
Romanos Capítulo 13:4
porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo.
Romanos Capítulo 13:5
Por lo cual es necesario estarle sujetos, no solamente por razón del castigo, sino también por causa de la conciencia.
Romanos Capítulo 13:6
Pues por esto pagáis también los tributos, porque son servidores de Dios que atienden continuamente a esto mismo.
Romanos Capítulo 13:7
Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra.
Romanos Capítulo 13:8
No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley.
Romanos Capítulo 13:9
Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
Romanos Capítulo 13:10
El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor.
Romanos Capítulo 13:11
Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos.
Romanos Capítulo 13:12
La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz.
Romanos Capítulo 13:13
Andemos como de día, honestamente; no en glotonerías y borracheras, no en lujurias y lascivias, no en contiendas y envidia,
Romanos Capítulo 13:14
sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.
Romanos Capítulo 14:19
Así que, sigamos lo que contribuye a la paz y a la mutua edificación.
2 Corintios Capítulo 10:3
Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne;
2 Corintios Capítulo 10:4
porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas,
Gálatas Capítulo 5:22
Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
Filipenses Capítulo 3:20
Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo;
Colosenses Capítulo 2:1
Porque quiero que sepáis cuán gran lucha sostengo por vosotros, y por los que están en Laodicea, y por todos los que nunca han visto mi rostro;
Colosenses Capítulo 2:2
para que sean consolados sus corazones, unidos en amor, hasta alcanzar todas las riquezas de pleno entendimiento, a fin de conocer el misterio de Dios el Padre, y de Cristo,
Colosenses Capítulo 2:3
en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento.
Colosenses Capítulo 2:4
Y esto lo digo para que nadie os engañe con palabras persuasivas.
Colosenses Capítulo 2:5
Porque aunque estoy ausente en cuerpo, no obstante en espíritu estoy con vosotros, gozándome y mirando vuestro buen orden y la firmeza de vuestra fe en Cristo.
Colosenses Capítulo 2:6
Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él;
Colosenses Capítulo 2:7
arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias.
Colosenses Capítulo 2:8
Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.
Colosenses Capítulo 2:9
Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,
Colosenses Capítulo 2:10
y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad.
Colosenses Capítulo 2:11
En él también fuisteis circuncidados con circuncisión no hecha a mano, al echar de vosotros el cuerpo pecaminoso carnal, en la circuncisión de Cristo;
Colosenses Capítulo 2:12
sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos.
Colosenses Capítulo 2:13
Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados,
Colosenses Capítulo 2:14
anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz,
Colosenses Capítulo 2:15
y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.
Colosenses Capítulo 2:16
Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo,
Colosenses Capítulo 2:17
todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo.
Colosenses Capítulo 2:18
Nadie os prive de vuestro premio, afectando humildad y culto a los ángeles, entremetiéndose en lo que no ha visto, vanamente hinchado por su propia mente carnal,
Colosenses Capítulo 2:19
y no asiéndose de la Cabeza, en virtud de quien todo el cuerpo, nutriéndose y uniéndose por las coyunturas y ligamentos, crece con el crecimiento que da Dios.
Colosenses Capítulo 2:20
Pues si habéis muerto con Cristo en cuanto a los rudimentos del mundo, ¿por qué, como si vivieseis en el mundo, os sometéis a preceptos
Colosenses Capítulo 2:21
tales como: No manejes, ni gustes, ni aun toques
Colosenses Capítulo 2:22
(en conformidad a mandamientos y doctrinas de hombres), cosas que todas se destruyen con el uso?
Colosenses Capítulo 2:23
Tales cosas tienen a la verdad cierta reputación de sabiduría en culto voluntario, en humildad y en duro trato del cuerpo; pero no tienen valor alguno contra los apetitos de la carne.
Colosenses Capítulo 3:1
Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.
Colosenses Capítulo 3:2
Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
Colosenses Capítulo 3:3
Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.
Colosenses Capítulo 3:4
Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria.
Colosenses Capítulo 3:5
Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría;
Colosenses Capítulo 3:6
cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia,
Colosenses Capítulo 3:7
en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas.
Colosenses Capítulo 3:8
Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.
Colosenses Capítulo 3:9
No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos,
Colosenses Capítulo 3:10
y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno,
Colosenses Capítulo 3:11
donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que Cristo es el todo, y en todos.
Colosenses Capítulo 3:12
Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia;
Colosenses Capítulo 3:13
soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.
Colosenses Capítulo 3:14
Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto.
Colosenses Capítulo 3:15
Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos.
Colosenses Capítulo 3:16
La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales.
Colosenses Capítulo 3:17
Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.
Colosenses Capítulo 3:18
Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor.
Colosenses Capítulo 3:19
Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas.
Colosenses Capítulo 3:20
Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor.
Colosenses Capítulo 3:21
Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten.
Colosenses Capítulo 3:22
Siervos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales, no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino con corazón sincero, temiendo a Dios.
Colosenses Capítulo 3:23
Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres;
Colosenses Capítulo 3:24
sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.
Colosenses Capítulo 3:25
Mas el que hace injusticia, recibirá la injusticia que hiciere, porque no hay acepción de personas.
Santiago Capítulo 4:1
¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros?
Apocalipsis Capítulo 1:1
La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan,
Apocalipsis Capítulo 17:14
Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles.