dándole tiempo a jesús
Salmos Capítulo 20:7
Estos confían en carros, y aquéllos en caballos; Mas nosotros del nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria.
Isaías Capítulo 56:7
yo los llevaré a mi santo monte, y los recrearé en mi casa de oración; sus holocaustos y sus sacrificios serán aceptos sobre mi altar; porque mi casa será llamada casa de oración para todos los pueblos.
Mateo Capítulo 6:33
Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Juan Capítulo 6:50
Este es el pan que desciende del cielo, para que el que de él come, no muera.
Juan Capítulo 6:51
Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.
Juan Capítulo 6:52
Entonces los judíos contendían entre sí, diciendo: ¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?
Juan Capítulo 6:53
Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros.
Juan Capítulo 6:54
El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
Juan Capítulo 6:55
Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida.
Juan Capítulo 6:56
El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él.
Juan Capítulo 6:57
Como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí.
Juan Capítulo 6:58
Este es el pan que descendió del cielo; no como vuestros padres comieron el maná, y murieron; el que come de este pan, vivirá eternamente.
Juan Capítulo 6:59
Estas cosas dijo en la sinagoga, enseñando en Capernaum.
Juan Capítulo 6:60
Al oirlas, muchos de sus discípulos dijeron: Dura es esta palabra; ¿quién la puede oír?
Juan Capítulo 6:61
Sabiendo Jesús en sí mismo que sus discípulos murmuraban de esto, les dijo: ¿Esto os ofende?
Juan Capítulo 6:62
¿Pues qué, si viereis al Hijo del Hombre subir adonde estaba primero?
Juan Capítulo 6:63
El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.
Juan Capítulo 6:64
Pero hay algunos de vosotros que no creen. Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían, y quién le había de entregar.
Juan Capítulo 6:65
Y dijo: Por eso os he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado del Padre.
Juan Capítulo 6:66
Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con él.
Juan Capítulo 6:67
Dijo entonces Jesús a los doce: ¿Queréis acaso iros también vosotros?
Juan Capítulo 6:68
Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
Juan Capítulo 6:69
Y nosotros hemos creído y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Juan Capítulo 6:70
Jesús les respondió: ¿No os he escogido yo a vosotros los doce, y uno de vosotros es diablo?
Juan Capítulo 6:71
Hablaba de Judas Iscariote, hijo de Simón; porque éste era el que le iba a entregar, y era uno de los doce.
Juan Capítulo 15:4
Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
Juan Capítulo 20:19
Cuando llegó la noche de aquel mismo día, el primero de la semana, estando las puertas cerradas en el lugar donde los discípulos estaban reunidos por miedo de los judíos, vino Jesús, y puesto en medio, les dijo: Paz a vosotros.
Juan Capítulo 20:20
Y cuando les hubo dicho esto, les mostró las manos y el costado. Y los discípulos se regocijaron viendo al Señor.
Juan Capítulo 20:21
Entonces Jesús les dijo otra vez: Paz a vosotros. Como me envió el Padre, así también yo os envío.
Juan Capítulo 20:22
Y habiendo dicho esto, sopló, y les dijo: Recibid el Espíritu Santo.
Juan Capítulo 20:23
A quienes remitiereis los pecados, les son remitidos; y a quienes se los retuviereis, les son retenidos.
Juan Capítulo 20:24
Pero Tomás, uno de los doce, llamado Dídimo, no estaba con ellos cuando Jesús vino.
Hechos Capítulo 4:12
Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.
Romanos Capítulo 12:1
Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
Romanos Capítulo 16:18
Porque tales personas no sirven a nuestro Señor Jesucristo, sino a sus propios vientres, y con suaves palabras y lisonjas engañan los corazones de los ingenuos.
2 Corintios Capítulo 2:14
Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento.
2 Corintios Capítulo 6:14
No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?
Gálatas Capítulo 2:20
Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
Efesios Capítulo 5:16
aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.
Colosenses Capítulo 3:8
Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.
1 Tesalonicenses Capítulo 5:21
Examinadlo todo; retened lo bueno.
Tito Capítulo 1:16
Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra.
Hebreos Capítulo 13:16
Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios.
Santiago Capítulo 2:14
Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle?
Santiago Capítulo 2:15
Y si un hermano o una hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de cada día,
Santiago Capítulo 2:16
y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha?
Santiago Capítulo 2:17
Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma.
1 Juan Capítulo 3:16
En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.
1 Juan Capítulo 3:17
Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?
1 Juan Capítulo 3:18
Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.
Judas Capítulo 1:21
conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna.
Apocalipsis Capítulo 3:20
He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.