apóstol pablo
Hechos Capítulo 20:24
Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.
Romanos Capítulo 1:1
Pablo, siervo de Jesucristo, llamado a ser apóstol, apartado para el evangelio de Dios,
Romanos Capítulo 1:2
que él había prometido antes por sus profetas en las santas Escrituras,
Romanos Capítulo 1:3
acerca de su Hijo, nuestro Señor Jesucristo, que era del linaje de David según la carne,
Romanos Capítulo 1:4
que fue declarado Hijo de Dios con poder, según el Espíritu de santidad, por la resurrección de entre los muertos,
Romanos Capítulo 1:5
y por quien recibimos la gracia y el apostolado, para la obediencia a la fe en todas las naciones por amor de su nombre;
Romanos Capítulo 1:6
entre las cuales estáis también vosotros, llamados a ser de Jesucristo;
Romanos Capítulo 1:7
a todos los que estáis en Roma, amados de Dios, llamados a ser santos: Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.
Romanos Capítulo 1:8
Primeramente doy gracias a mi Dios mediante Jesucristo con respecto a todos vosotros, de que vuestra fe se divulga por todo el mundo.
Romanos Capítulo 1:9
Porque testigo me es Dios, a quien sirvo en mi espíritu en el evangelio de su Hijo, de que sin cesar hago mención de vosotros siempre en mis oraciones,
Romanos Capítulo 1:10
rogando que de alguna manera tenga al fin, por la voluntad de Dios, un próspero viaje para ir a vosotros.
Romanos Capítulo 1:11
Porque deseo veros, para comunicaros algún don espiritual, a fin de que seáis confirmados;
Romanos Capítulo 1:12
esto es, para ser mutuamente confortados por la fe que nos es común a vosotros y a mí.
Romanos Capítulo 1:13
Pero no quiero, hermanos, que ignoréis que muchas veces me he propuesto ir a vosotros (pero hasta ahora he sido estorbado), para tener también entre vosotros algún fruto, como entre los demás gentiles.
Romanos Capítulo 1:14
A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor.
Romanos Capítulo 1:15
Así que, en cuanto a mí, pronto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis en Roma.
Romanos Capítulo 1:16
Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.
Romanos Capítulo 1:17
Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
Romanos Capítulo 1:18
Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad;
Romanos Capítulo 1:19
porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó.
Romanos Capítulo 1:20
Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.
Romanos Capítulo 1:21
Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido.
Romanos Capítulo 1:22
Profesando ser sabios, se hicieron necios,
Romanos Capítulo 1:23
y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles.
Romanos Capítulo 1:24
Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos,
Romanos Capítulo 1:25
ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén.
Romanos Capítulo 1:26
Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza,
Romanos Capítulo 1:27
y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío.
Romanos Capítulo 1:28
Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen;
Romanos Capítulo 1:29
estando atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades;
Romanos Capítulo 1:30
murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres,
Romanos Capítulo 1:31
necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia;
Romanos Capítulo 1:32
quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican.
Romanos Capítulo 7:15
Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso hago.
Gálatas Capítulo 1:1
Pablo, apóstol (no de hombres ni por hombre, sino por Jesucristo y por Dios el Padre que lo resucitó de los muertos),
Gálatas Capítulo 1:2
y todos los hermanos que están conmigo, a las iglesias de Galacia:
Gálatas Capítulo 1:3
Gracia y paz sean a vosotros, de Dios el Padre y de nuestro Señor Jesucristo,
Gálatas Capítulo 1:4
el cual se dio a sí mismo por nuestros pecados para librarnos del presente siglo malo, conforme a la voluntad de nuestro Dios y Padre,
Gálatas Capítulo 1:5
a quien sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
Gálatas Capítulo 1:6
Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente.
Gálatas Capítulo 1:7
No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo.
Gálatas Capítulo 1:8
Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.
Gálatas Capítulo 1:9
Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.
Gálatas Capítulo 1:10
Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.
Gálatas Capítulo 1:11
Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no es según hombre;
Gálatas Capítulo 1:12
pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo.
Gálatas Capítulo 1:13
Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba;
Gálatas Capítulo 1:14
y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres.
Gálatas Capítulo 1:15
Pero cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia,
Gálatas Capítulo 1:16
revelar a su Hijo en mí, para que yo le predicase entre los gentiles, no consulté en seguida con carne y sangre,
Gálatas Capítulo 1:17
ni subí a Jerusalén a los que eran apóstoles antes que yo; sino que fui a Arabia, y volví de nuevo a Damasco.
Gálatas Capítulo 1:18
Después, pasados tres años, subí a Jerusalén para ver a Pedro, y permanecí con él quince días;
Gálatas Capítulo 1:19
pero no vi a ningún otro de los apóstoles, sino a Jacobo el hermano del Señor.
Gálatas Capítulo 1:20
En esto que os escribo, he aquí delante de Dios que no miento.
Gálatas Capítulo 1:21
Después fui a las regiones de Siria y de Cilicia,
Gálatas Capítulo 2:1
Después, pasados catorce años, subí otra vez a Jerusalén con Bernabé, llevando también conmigo a Tito.
Gálatas Capítulo 2:2
Pero subí según una revelación, y para no correr o haber corrido en vano, expuse en privado a los que tenían cierta reputación el evangelio que predico entre los gentiles.
Gálatas Capítulo 2:3
Mas ni aun Tito, que estaba conmigo, con todo y ser griego, fue obligado a circuncidarse;
Gálatas Capítulo 2:4
y esto a pesar de los falsos hermanos introducidos a escondidas, que entraban para espiar nuestra libertad que tenemos en Cristo Jesús, para reducirnos a esclavitud,
Gálatas Capítulo 2:5
a los cuales ni por un momento accedimos a someternos, para que la verdad del evangelio permaneciese con vosotros.
Gálatas Capítulo 2:6
Pero de los que tenían reputación de ser algo (lo que hayan sido en otro tiempo nada me importa; Dios no hace acepción de personas), a mí, pues, los de reputación nada nuevo me comunicaron.
Gálatas Capítulo 2:7
Antes por el contrario, como vieron que me había sido encomendado el evangelio de la incircuncisión, como a Pedro el de la circuncisión
Gálatas Capítulo 2:8
(pues el que actuó en Pedro para el apostolado de la circuncisión, actuó también en mí para con los gentiles),
Gálatas Capítulo 2:9
y reconociendo la gracia que me había sido dada, Jacobo, Cefas y Juan, que eran considerados como columnas, nos dieron a mí y a Bernabé la diestra en señal de compañerismo, para que nosotros fuésemos a los gentiles, y ellos a la circuncisión.
Gálatas Capítulo 2:10
Solamente nos pidieron que nos acordásemos de los pobres; lo cual también procuré con diligencia hacer.
Gálatas Capítulo 2:11
Pero cuando Pedro vino a Antioquía, le resistí cara a cara, porque era de condenar.
Gálatas Capítulo 2:12
Pues antes que viniesen algunos de parte de Jacobo, comía con los gentiles; pero después que vinieron, se retraía y se apartaba, porque tenía miedo de los de la circuncisión.
Gálatas Capítulo 2:13
Y en su simulación participaban también los otros judíos, de tal manera que aun Bernabé fue también arrastrado por la hipocresía de ellos.
Gálatas Capítulo 2:14
Pero cuando vi que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos: Si tú, siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar?
Gálatas Capítulo 2:15
Nosotros, judíos de nacimiento, y no pecadores de entre los gentiles,
Gálatas Capítulo 2:16
sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley nadie será justificado.
Gálatas Capítulo 2:17
Y si buscando ser justificados en Cristo, también nosotros somos hallados pecadores, ¿es por eso Cristo ministro de pecado? En ninguna manera.
Gálatas Capítulo 2:18
Porque si las cosas que destruí, las mismas vuelvo a edificar, transgresor me hago.
Gálatas Capítulo 2:19
Porque yo por la ley soy muerto para la ley, a fin de vivir para Dios.
Gálatas Capítulo 2:20
Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
Gálatas Capítulo 2:21
No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo.
Efesios Capítulo 3:7
del cual yo fui hecho ministro por el don de la gracia de Dios que me ha sido dado según la operación de su poder.
Colosenses Capítulo 1:21
Y a vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha reconciliado
Colosenses Capítulo 1:22
en su cuerpo de carne, por medio de la muerte, para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él;
Colosenses Capítulo 1:23
si en verdad permanecéis fundados y firmes en la fe, y sin moveros de la esperanza del evangelio que habéis oído, el cual se predica en toda la creación que está debajo del cielo; del cual yo Pablo fui hecho ministro.