destrucción de israel
Génesis Capítulo 12:3
Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.
Levítico Capítulo 26:1
No haréis para vosotros ídolos, ni escultura, ni os levantaréis estatua, ni pondréis en vuestra tierra piedra pintada para inclinaros a ella; porque yo soy Jehová vuestro Dios.
Levítico Capítulo 26:2
Guardad mis días de reposo, y tened en reverencia mi santuario. Yo Jehová.
Levítico Capítulo 26:3
Si anduviereis en mis decretos y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra,
Levítico Capítulo 26:4
yo daré vuestra lluvia en su tiempo, y la tierra rendirá sus productos, y el árbol del campo dará su fruto.
Levítico Capítulo 26:5
Vuestra trilla alcanzará a la vendimia, y la vendimia alcanzará a la sementera, y comeréis vuestro pan hasta saciaros, y habitaréis seguros en vuestra tierra.
Levítico Capítulo 26:6
Y yo daré paz en la tierra, y dormiréis, y no habrá quien os espante; y haré quitar de vuestra tierra las malas bestias, y la espada no pasará por vuestro país.
Levítico Capítulo 26:7
Y perseguiréis a vuestros enemigos, y caerán a espada delante de vosotros.
Levítico Capítulo 26:8
Cinco de vosotros perseguirán a ciento, y ciento de vosotros perseguirán a diez mil, y vuestros enemigos caerán a filo de espada delante de vosotros.
Levítico Capítulo 26:9
Porque yo me volveré a vosotros, y os haré crecer, y os multiplicaré, y afirmaré mi pacto con vosotros.
Levítico Capítulo 26:10
Comeréis lo añejo de mucho tiempo, y pondréis fuera lo añejo para guardar lo nuevo.
Levítico Capítulo 26:11
Y pondré mi morada en medio de vosotros, y mi alma no os abominará;
Levítico Capítulo 26:12
y andaré entre vosotros, y yo seré vuestro Dios, y vosotros seréis mi pueblo.
Levítico Capítulo 26:13
Yo Jehová vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto, para que no fueseis sus siervos, y rompí las coyundas de vuestro yugo, y os he hecho andar con el rostro erguido.
Levítico Capítulo 26:14
Pero si no me oyereis, ni hiciereis todos estos mis mandamientos,
Levítico Capítulo 26:15
y si desdeñareis mis decretos, y vuestra alma menospreciare mis estatutos, no ejecutando todos mis mandamientos, e invalidando mi pacto,
Levítico Capítulo 26:16
yo también haré con vosotros esto: enviaré sobre vosotros terror, extenuación y calentura, que consuman los ojos y atormenten el alma; y sembraréis en vano vuestra semilla, porque vuestros enemigos la comerán.
Levítico Capítulo 26:17
Pondré mi rostro contra vosotros, y seréis heridos delante de vuestros enemigos; y los que os aborrecen se enseñorearán de vosotros, y huiréis sin que haya quien os persiga.
Levítico Capítulo 26:18
Y si aun con estas cosas no me oyereis, yo volveré a castigaros siete veces más por vuestros pecados.
Levítico Capítulo 26:19
Y quebrantaré la soberbia de vuestro orgullo, y haré vuestro cielo como hierro, y vuestra tierra como bronce.
Levítico Capítulo 26:20
Vuestra fuerza se consumirá en vano, porque vuestra tierra no dará su producto, y los árboles de la tierra no darán su fruto.
Levítico Capítulo 26:21
Si anduviereis conmigo en oposición, y no me quisiereis oír, yo añadiré sobre vosotros siete veces más plagas según vuestros pecados.
Levítico Capítulo 26:22
Enviaré también contra vosotros bestias fieras que os arrebaten vuestros hijos, y destruyan vuestro ganado, y os reduzcan en número, y vuestros caminos sean desiertos.
Levítico Capítulo 26:23
Y si con estas cosas no fuereis corregidos, sino que anduviereis conmigo en oposición,
Levítico Capítulo 26:24
yo también procederé en contra de vosotros, y os heriré aún siete veces por vuestros pecados.
Levítico Capítulo 26:25
Traeré sobre vosotros espada vengadora, en vindicación del pacto; y si buscareis refugio en vuestras ciudades, yo enviaré pestilencia entre vosotros, y seréis entregados en mano del enemigo.
Levítico Capítulo 26:26
Cuando yo os quebrante el sustento del pan, cocerán diez mujeres vuestro pan en un horno, y os devolverán vuestro pan por peso; y comeréis, y no os saciaréis.
Levítico Capítulo 26:27
Si aun con esto no me oyereis, sino que procediereis conmigo en oposición,
Levítico Capítulo 26:28
yo procederé en contra de vosotros con ira, y os catigaré aún siete veces por vuestros pecados.
Levítico Capítulo 26:29
Y comeréis la carne de vuestros hijos, y comeréis la carne de vuestras hijas.
Levítico Capítulo 26:30
Destruiré vuestros lugares altos, y derribaré vuestras imágenes, y pondré vuestros cuerpos muertos sobre los cuerpos muertos de vuestros ídolos, y mi alma os abominará.
Levítico Capítulo 26:31
Haré desiertas vuestras ciudades, y asolaré vuestros santuarios, y no oleré la fragancia de vuestro suave perfume.
Levítico Capítulo 26:32
Asolaré también la tierra, y se pasmarán por ello vuestros enemigos que en ella moren;
Levítico Capítulo 26:33
y a vosotros os esparciré entre las naciones, y desenvainaré espada en pos de vosotros; y vuestra tierra estará asolada, y desiertas vuestras ciudades.
Levítico Capítulo 26:34
Entonces la tierra gozará sus días de reposo, todos los días que esté asolada, mientras vosotros estéis en la tierra de vuestros enemigos; la tierra descansará entonces y gozará sus días de reposo.
Levítico Capítulo 26:35
Todo el tiempo que esté asolada, descansará por lo que no reposó en los días de reposo cuando habitabais en ella.
Levítico Capítulo 26:36
Y a los que queden de vosotros infundiré en sus corazones tal cobardía, en la tierra de sus enemigos, que el sonido de una hoja que se mueva los perseguirá, y huirán como ante la espada, y caerán sin que nadie los persiga.
Levítico Capítulo 26:37
Tropezarán los unos con los otros como si huyeran ante la espada, aunque nadie los persiga; y no podréis resistir delante de vuestros enemigos.
Levítico Capítulo 26:38
Y pereceréis entre las naciones, y la tierra de vuestros enemigos os consumirá.
Levítico Capítulo 26:39
Y los que queden de vosotros decaerán en las tierras de vuestros enemigos por su iniquidad; y por la iniquidad de sus padres decaerán con ellos.
Levítico Capítulo 26:40
Y confesarán su iniquidad, y la iniquidad de sus padres, por su prevaricación con que prevaricaron contra mí; y también porque anduvieron conmigo en oposición,
Levítico Capítulo 26:41
yo también habré andado en contra de ellos, y los habré hecho entrar en la tierra de sus enemigos; y entonces se humillará su corazón incircunciso, y reconocerán su pecado.
Levítico Capítulo 26:42
Entonces yo me acordaré de mi pacto con Jacob, y asimismo de mi pacto con Isaac, y también de mi pacto con Abraham me acordaré, y haré memoria de la tierra.
Levítico Capítulo 26:43
Pero la tierra será abandonada por ellos, y gozará sus días de reposo, estando desierta a causa de ellos; y entonces se someterán al castigo de sus iniquidades; por cuanto menospreciaron mis ordenanzas, y su alma tuvo fastidio de mis estatutos.
Levítico Capítulo 26:44
Y aun con todo esto, estando ellos en tierra de sus enemigos, yo no los desecharé, ni los abominaré para consumirlos, invalidando mi pacto con ellos; porque yo Jehová soy su Dios.
Levítico Capítulo 26:45
Antes me acordaré de ellos por el pacto antiguo, cuando los saqué de la tierra de Egipto a los ojos de las naciones, para ser su Dios. Yo Jehová.
Levítico Capítulo 26:46
Estos son los estatutos, ordenanzas y leyes que estableció Jehová entre sí y los hijos de Israel en el monte de Sinaí por mano de Moisés.
Deuteronomio Capítulo 28:1
Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra.
Deuteronomio Capítulo 28:2
Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.
Deuteronomio Capítulo 28:3
Bendito serás tú en la ciudad, y bendito tú en el campo.
Deuteronomio Capítulo 28:4
Bendito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, el fruto de tus bestias, la cría de tus vacas y los rebaños de tus ovejas.
Deuteronomio Capítulo 28:5
Benditas serán tu canasta y tu artesa de amasar.
Deuteronomio Capítulo 28:6
Bendito serás en tu entrar, y bendito en tu salir.
Deuteronomio Capítulo 28:7
Jehová derrotará a tus enemigos que se levantaren contra ti; por un camino saldrán contra ti, y por siete caminos huirán de delante de ti.
Deuteronomio Capítulo 28:8
Jehová te enviará su bendición sobre tus graneros, y sobre todo aquello en que pusieres tu mano; y te bendecirá en la tierra que Jehová tu Dios te da.
Deuteronomio Capítulo 28:9
Te confirmará Jehová por pueblo santo suyo, como te lo ha jurado, cuando guardares los mandamientos de Jehová tu Dios, y anduvieres en sus caminos.
Deuteronomio Capítulo 28:10
Y verán todos los pueblos de la tierra que el nombre de Jehová es invocado sobre ti, y te temerán.
Deuteronomio Capítulo 28:11
Y te hará Jehová sobreabundar en bienes, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu bestia, y en el fruto de tu tierra, en el país que Jehová juró a tus padres que te había de dar.
Deuteronomio Capítulo 28:12
Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchas naciones, y tú no pedirás prestado.
Deuteronomio Capítulo 28:13
Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas,
Deuteronomio Capítulo 28:14
y si no te apartares de todas las palabras que yo te mando hoy, ni a diestra ni a siniestra, para ir tras dioses ajenos y servirles.
Deuteronomio Capítulo 28:15
Pero acontecerá, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para procurar cumplir todos sus mandamientos y sus estatutos que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán.
Deuteronomio Capítulo 28:16
Maldito serás tú en la ciudad, y maldito en el campo.
Deuteronomio Capítulo 28:17
Maldita tu canasta, y tu artesa de amasar.
Deuteronomio Capítulo 28:18
Maldito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, la cría de tus vacas, y los rebaños de tus ovejas.
Deuteronomio Capítulo 28:19
Maldito serás en tu entrar, y maldito en tu salir.
Deuteronomio Capítulo 28:20
Y Jehová enviará contra ti la maldición, quebranto y asombro en todo cuanto pusieres mano e hicieres, hasta que seas destruido, y perezcas pronto a causa de la maldad de tus obras por las cuales me habrás dejado.
Deuteronomio Capítulo 28:21
Jehová traerá sobre ti mortandad, hasta que te consuma de la tierra a la cual entras para tomar posesión de ella.
Deuteronomio Capítulo 28:22
Jehová te herirá de tisis, de fiebre, de inflamación y de ardor, con sequía, con calamidad repentina y con añublo; y te perseguirán hasta que perezcas.
Deuteronomio Capítulo 28:23
Y los cielos que están sobre tu cabeza serán de bronce, y la tierra que está debajo de ti, de hierro.
Deuteronomio Capítulo 28:24
Dará Jehová por lluvia a tu tierra polvo y ceniza; de los cielos descenderán sobre ti hasta que perezcas.
Deuteronomio Capítulo 28:25
Jehová te entregará derrotado delante de tus enemigos; por un camino saldrás contra ellos, y por siete caminos huirás delante de ellos; y serás vejado por todos los reinos de la tierra.
Deuteronomio Capítulo 28:26
Y tus cadáveres servirán de comida a toda ave del cielo y fiera de la tierra, y no habrá quien las espante.
Deuteronomio Capítulo 28:27
Jehová te herirá con la úlcera de Egipto, con tumores, con sarna, y con comezón de que no puedas ser curado.
Deuteronomio Capítulo 28:28
Jehová te herirá con locura, ceguera y turbación de espíritu;
Deuteronomio Capítulo 28:29
y palparás a mediodía como palpa el ciego en la oscuridad, y no serás prosperado en tus caminos; y no serás sino oprimido y robado todos los días, y no habrá quien te salve.
Deuteronomio Capítulo 28:30
Te desposarás con mujer, y otro varón dormirá con ella; edificarás casa, y no habitarás en ella; plantarás viña, y no la disfrutarás.
Deuteronomio Capítulo 28:31
Tu buey será matado delante de tus ojos, y tú no comerás de él; tu asno será arrebatado de delante de ti, y no te será devuelto; tus ovejas serán dadas a tus enemigos, y no tendrás quien te las rescate.
Deuteronomio Capítulo 28:32
Tus hijos y tus hijas serán entregados a otro pueblo, y tus ojos lo verán, y desfallecerán por ellos todo el día; y no habrá fuerza en tu mano.
Deuteronomio Capítulo 28:33
El fruto de tu tierra y de todo tu trabajo comerá pueblo que no conociste; y no serás sino oprimido y quebrantado todos los días.
Deuteronomio Capítulo 28:34
Y enloquecerás a causa de lo que verás con tus ojos.
Deuteronomio Capítulo 28:35
Te herirá Jehová con maligna pústula en las rodillas y en las piernas, desde la planta de tu pie hasta tu coronilla, sin que puedas ser curado.
Deuteronomio Capítulo 28:36
Jehová te llevará a ti, y al rey que hubieres puesto sobre ti, a nación que no conociste ni tú ni tus padres; y allá servirás a dioses ajenos, al palo y a la piedra.
Deuteronomio Capítulo 28:37
Y serás motivo de horror, y servirás de refrán y de burla a todos los pueblos a los cuales te llevará Jehová.
Deuteronomio Capítulo 28:38
Sacarás mucha semilla al campo, y recogerás poco, porque la langosta lo consumirá.
Deuteronomio Capítulo 28:39
Plantarás viñas y labrarás, pero no beberás vino, ni recogerás uvas, porque el gusano se las comerá.
Deuteronomio Capítulo 28:40
Tendrás olivos en todo tu territorio, mas no te ungirás con el aceite, porque tu aceituna se caerá.
Deuteronomio Capítulo 28:41
Hijos e hijas engendrarás, y no serán para ti, porque irán en cautiverio.
Deuteronomio Capítulo 28:42
Toda tu arboleda y el fruto de tu tierra serán consumidos por la langosta.
Deuteronomio Capítulo 28:43
El extranjero que estará en medio de ti se elevará sobre ti muy alto, y tú descenderás muy abajo.
Deuteronomio Capítulo 28:44
El te prestará a ti, y tú no le prestarás a él; él será por cabeza, y tú serás por cola.
Deuteronomio Capítulo 28:45
Y vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te perseguirán, y te alcanzarán hasta que perezcas; por cuanto no habrás atendido a la voz de Jehová tu Dios, para guardar sus mandamientos y sus estatutos, que él te mandó;
Deuteronomio Capítulo 28:46
y serán en ti por señal y por maravilla, y en tu descendencia para siempre.
Deuteronomio Capítulo 28:47
Por cuanto no serviste a Jehová tu Dios con alegría y con gozo de corazón, por la abundancia de todas las cosas,
Deuteronomio Capítulo 28:48
servirás, por tanto, a tus enemigos que enviare Jehová contra ti, con hambre y con sed y con desnudez, y con falta de todas las cosas; y él pondrá yugo de hierro sobre tu cuello, hasta destruirte.
Deuteronomio Capítulo 28:49
Jehová traerá contra ti una nación de lejos, del extremo de la tierra, que vuele como águila, nación cuya lengua no entiendas;
Deuteronomio Capítulo 28:50
gente fiera de rostro, que no tendrá respeto al anciano, ni perdonará al niño;
Deuteronomio Capítulo 28:51
y comerá el fruto de tu bestia y el fruto de tu tierra, hasta que perezcas; y no te dejará grano, ni mosto, ni aceite, ni la cría de tus vacas, ni los rebaños de tus ovejas, hasta destruirte.
Deuteronomio Capítulo 28:52
Pondrá sitio a todas tus ciudades, hasta que caigan tus muros altos y fortificados en que tú confías, en toda tu tierra; sitiará, pues, todas tus ciudades y toda la tierra que Jehová tu Dios te hubiere dado.
Deuteronomio Capítulo 28:53
Y comerás el fruto de tu vientre, la carne de tus hijos y de tus hijas que Jehová tu Dios te dio, en el sitio y en el apuro con que te angustiará tu enemigo.
Deuteronomio Capítulo 28:54
El hombre tierno en medio de ti, y el muy delicado, mirará con malos ojos a su hermano, y a la mujer de su seno, y al resto de sus hijos que le quedaren;
Deuteronomio Capítulo 28:55
para no dar a alguno de ellos de la carne de sus hijos, que él comiere, por no haberle quedado nada, en el asedio y en el apuro con que tu enemigo te oprimirá en todas tus ciudades.
Deuteronomio Capítulo 28:56
La tierna y la delicada entre vosotros, que nunca la planta de su pie intentaría sentar sobre la tierra, de pura delicadeza y ternura, mirará con malos ojos al marido de su seno, a su hijo, a su hija,
Deuteronomio Capítulo 28:57
al recién nacido que sale de entre sus pies, y a sus hijos que diere a luz; pues los comerá ocultamente, por la carencia de todo, en el asedio y en el apuro con que tu enemigo te oprimirá en tus ciudades.
Deuteronomio Capítulo 28:58
Si no cuidares de poner por obra todas las palabras de esta ley que están escritas en este libro, temiendo este nombre glorioso y temible: JEHOVÁ TU DIOS,
Deuteronomio Capítulo 28:59
entonces Jehová aumentará maravillosamente tus plagas y las plagas de tu descendencia, plagas grandes y permanentes, y enfermedades malignas y duraderas;
Deuteronomio Capítulo 28:60
y traerá sobre ti todos los males de Egipto, delante de los cuales temiste, y no te dejarán.
Deuteronomio Capítulo 28:61
Asimismo toda enfermedad y toda plaga que no está escrita en el libro de esta ley, Jehová la enviará sobre ti, hasta que seas destruido.
Deuteronomio Capítulo 28:62
Y quedaréis pocos en número, en lugar de haber sido como las estrellas del cielo en multitud, por cuanto no obedecisteis a la voz de Jehová tu Dios.
Deuteronomio Capítulo 28:63
Así como Jehová se gozaba en haceros bien y en multiplicaros, así se gozará Jehová en arruinaros y en destruiros; y seréis arrancados de sobre la tierra a la cual entráis para tomar posesión de ella.
Deuteronomio Capítulo 28:64
Y Jehová te esparcirá por todos los pueblos, desde un extremo de la tierra hasta el otro extremo; y allí servirás a dioses ajenos que no conociste tú ni tus padres, al leño y a la piedra.
Deuteronomio Capítulo 28:65
Y ni aun entre estas naciones descansarás, ni la planta de tu pie tendrá reposo; pues allí te dará Jehová corazón temeroso, y desfallecimiento de ojos, y tristeza de alma;
Deuteronomio Capítulo 28:66
y tendrás tu vida como algo que pende delante de ti, y estarás temeroso de noche y de día, y no tendrás seguridad de tu vida.
Deuteronomio Capítulo 28:67
Por la mañana dirás: ¡Quién diera que fuese la tarde! y a la tarde dirás: ¡Quién diera que fuese la mañana! por el miedo de tu corazón con que estarás amedrentado, y por lo que verán tus ojos.
Deuteronomio Capítulo 28:68
Y Jehová te hará volver a Egipto en naves, por el camino del cual te ha dicho: Nunca más volverás; y allí seréis vendidos a vuestros enemigos por esclavos y por esclavas, y no habrá quien os compre.
Jeremías Capítulo 30:7
¡Ah, cuán grande es aquel día! tanto, que no hay otro semejante a él; tiempo de angustia para Jacob; pero de ella será librado.
Jeremías Capítulo 31:1
En aquel tiempo, dice Jehová, yo seré por Dios a todas las familias de Israel, y ellas me serán a mí por pueblo.
Jeremías Capítulo 31:2
Así ha dicho Jehová: El pueblo que escapó de la espada halló gracia en el desierto, cuando Israel iba en busca de reposo.
Jeremías Capítulo 31:3
Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.
Jeremías Capítulo 31:4
Aún te edificaré, y serás edificada, oh virgen de Israel; todavía serás adornada con tus panderos, y saldrás en alegres danzas.
Jeremías Capítulo 31:5
Aún plantarás viñas en los montes de Samaria; plantarán los que plantan, y disfrutarán de ellas.
Jeremías Capítulo 31:6
Porque habrá día en que clamarán los guardas en el monte de Efraín: Levantaos, y subamos a Sion, a Jehová nuestro Dios.
Jeremías Capítulo 31:7
Porque así ha dicho Jehová: Regocijaos en Jacob con alegría, y dad voces de júbilo a la cabeza de naciones; haced oír, alabad, y decid: Oh Jehová, salva a tu pueblo, el remanente de Israel.
Jeremías Capítulo 31:8
He aquí yo los hago volver de la tierra del norte, y los reuniré de los fines de la tierra, y entre ellos ciegos y cojos, la mujer que está encinta y la que dio a luz juntamente; en gran compañía volverán acá.
Jeremías Capítulo 31:9
Irán con lloro, mas con misericordia los haré volver, y los haré andar junto a arroyos de aguas, por camino derecho en el cual no tropezarán; porque soy a Israel por padre, y Efraín es mi primogénito.
Jeremías Capítulo 31:10
Oíd palabra de Jehová, oh naciones, y hacedlo saber en las costas que están lejos, y decid: El que esparció a Israel lo reunirá y guardará, como el pastor a su rebaño.
Jeremías Capítulo 31:11
Porque Jehová redimió a Jacob, lo redimió de mano del más fuerte que él.
Jeremías Capítulo 31:12
Y vendrán con gritos de gozo en lo alto de Sion, y correrán al bien de Jehová, al pan, al vino, al aceite, y al ganado de las ovejas y de las vacas; y su alma será como huerto de riego, y nunca más tendrán dolor.
Jeremías Capítulo 31:13
Entonces la virgen se alegrará en la danza, los jóvenes y los viejos juntamente; y cambiaré su lloro en gozo, y los consolaré, y los alegraré de su dolor.
Jeremías Capítulo 31:14
Y el alma del sacerdote satisfaré con abundancia, y mi pueblo será saciado de mi bien, dice Jehová.
Jeremías Capítulo 31:15
Así ha dicho Jehová: Voz fue oída en Ramá, llanto y lloro amargo; Raquel que lamenta por sus hijos, y no quiso ser consolada acerca de sus hijos, porque perecieron.
Jeremías Capítulo 31:16
Así ha dicho Jehová: Reprime del llanto tu voz, y de las lágrimas tus ojos; porque salario hay para tu trabajo, dice Jehová, y volverán de la tierra del enemigo.
Jeremías Capítulo 31:17
Esperanza hay también para tu porvenir, dice Jehová, y los hijos volverán a su propia tierra.
Jeremías Capítulo 31:18
Escuchando, he oído a Efraín que se lamentaba: Me azotaste, y fui castigado como novillo indómito; conviérteme, y seré convertido, porque tú eres Jehová mi Dios.
Jeremías Capítulo 31:19
Porque después que me aparté tuve arrepentimiento, y después que reconocí mi falta, herí mi muslo; me avergoncé y me confundí, porque llevé la afrenta de mi juventud.
Jeremías Capítulo 31:20
¿No es Efraín hijo precioso para mí? ¿no es niño en quien me deleito? pues desde que hablé de él, me he acordado de él constantemente. Por eso mis entrañas se conmovieron por él; ciertamente tendré de él misericordia, dice Jehová.
Jeremías Capítulo 31:21
Establécete señales, ponte majanos altos, nota atentamente la calzada; vuélvete por el camino por donde fuiste, virgen de Israel, vuelve a estas tus ciudades.
Jeremías Capítulo 31:22
¿Hasta cuándo andarás errante, oh hija contumaz? Porque Jehová creará una cosa nueva sobre la tierra: la mujer rodeará al varón.
Jeremías Capítulo 31:23
Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Aún dirán esta palabra en la tierra de Judá y en sus ciudades, cuando yo haga volver sus cautivos: Jehová te bendiga, oh morada de justicia, oh monte santo.
Jeremías Capítulo 31:24
Y habitará allí Judá, y también en todas sus ciudades labradores, y los que van con rebaño.
Jeremías Capítulo 31:25
Porque satisfaré al alma cansada, y saciaré a toda alma entristecida.
Jeremías Capítulo 31:26
En esto me desperté, y vi, y mi sueño me fue agradable.
Jeremías Capítulo 31:27
He aquí vienen días, dice Jehová, en que sembraré la casa de Israel y la casa de Judá de simiente de hombre y de simiente de animal.
Jeremías Capítulo 31:28
Y así como tuve cuidado de ellos para arrancar y derribar, y trastornar y perder y afligir, tendré cuidado de ellos para edificar y plantar, dice Jehová.
Jeremías Capítulo 31:29
En aquellos días no dirán más: Los padres comieron las uvas agrias y los dientes de los hijos tienen la dentera,
Jeremías Capítulo 31:30
sino que cada cual morirá por su propia maldad; los dientes de todo hombre que comiere las uvas agrias, tendrán la dentera.
Jeremías Capítulo 31:31
He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de Judá.
Jeremías Capítulo 31:32
No como el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de la tierra de Egipto; porque ellos invalidaron mi pacto, aunque fui yo un marido para ellos, dice Jehová.
Jeremías Capítulo 31:33
Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo.
Jeremías Capítulo 31:34
Y no enseñará más ninguno a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a Jehová; porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice Jehová; porque perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado.
Jeremías Capítulo 31:35
Así ha dicho Jehová, que da el sol para luz del día, las leyes de la luna y de las estrellas para luz de la noche, que parte el mar, y braman sus ondas; Jehová de los ejércitos es su nombre:
Jeremías Capítulo 31:36
Si faltaren estas leyes delante de mí, dice Jehová, también la descendencia de Israel faltará para no ser nación delante de mí eternamente.
Jeremías Capítulo 31:37
Así ha dicho Jehová: Si los cielos arriba se pueden medir, y explorarse abajo los fundamentos de la tierra, también yo desecharé toda la descendencia de Israel por todo lo que hicieron, dice Jehová.
Jeremías Capítulo 31:38
He aquí que vienen días, dice Jehová, en que la ciudad será edificada a Jehová, desde la torre de Hananeel hasta la puerta del Angulo.
Jeremías Capítulo 31:39
Y saldrá más allá el cordel de la medida delante de él sobre el collado de Gareb, y rodeará a Goa.
Jeremías Capítulo 31:40
Y todo el valle de los cuerpos muertos y de la ceniza, y todas las llanuras hasta el arroyo de Cedrón, hasta la esquina de la puerta de los caballos al oriente, será santo a Jehová; no será arrancada ni destruida más para siempre.
Ezequiel Capítulo 38:1
Vino a mí palabra de Jehová, diciendo:
Ezequiel Capítulo 38:2
Hijo de hombre, pon tu rostro contra Gog en tierra de Magog, príncipe soberano de Mesec y Tubal, y profetiza contra él,
Ezequiel Capítulo 38:3
y di: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí, yo estoy contra ti, oh Gog, príncipe soberano de Mesec y Tubal.
Ezequiel Capítulo 38:4
Y te quebrantaré, y pondré garfios en tus quijadas, y te sacaré a ti y a todo tu ejército, caballos y jinetes, de todo en todo equipados, gran multitud con paveses y escudos, teniendo todos ellos espadas;
Ezequiel Capítulo 38:5
Persia, Cus y Fut con ellos; todos ellos con escudo y yelmo;
Ezequiel Capítulo 38:6
Gomer, y todas sus tropas; la casa de Togarma, de los confines del norte, y todas sus tropas; muchos pueblos contigo.
Ezequiel Capítulo 38:7
Prepárate y apercíbete, tú y toda tu multitud que se ha reunido a ti, y sé tú su guarda.
Ezequiel Capítulo 38:8
De aquí a muchos días serás visitado; al cabo de años vendrás a la tierra salvada de la espada, recogida de muchos pueblos, a los montes de Israel, que siempre fueron una desolación; mas fue sacada de las naciones, y todos ellos morarán confiadamente.
Ezequiel Capítulo 38:9
Subrirás tú, y vendrás como tempestad; como nublado para cubrir la tierra serás tú y todas tus tropas, y muchos pueblos contigo.
Ezequiel Capítulo 38:10
Así ha dicho Jehová el Señor: En aquel día subirán palabras en tu corazón, y concebirás mal pensamiento,
Ezequiel Capítulo 38:11
y dirás: Subiré contra una tierra indefensa, iré contra gentes tranquilas que habitan confiadamente; todas ellas habitan sin muros, y no tienen cerrojos ni puertas;
Ezequiel Capítulo 38:12
para arrebatar despojos y para tomar botín, para poner tus manos sobre las tierras desiertas ya pobladas, y sobre el pueblo recogido de entre las naciones, que se hace de ganado y posesiones, que mora en la parte central de la tierra.
Ezequiel Capítulo 38:13
Sabá y Dedán, y los mercaderes de Tarsis y todos sus príncipes, te dirán: ¿Has venido a arrebatar despojos? ¿Has reunido tu multitud para tomar botín, para quitar plata y oro, para tomar ganados y posesiones, para tomar grandes despojos?
Ezequiel Capítulo 38:14
Por tanto, profetiza, hijo de hombre, y di a Gog: Así ha dicho Jehová el Señor: En aquel tiempo, cuando mi pueblo Israel habite con seguridad, ¿no lo sabrás tú?
Ezequiel Capítulo 38:15
Vendrás de tu lugar, de las regiones del norte, tú y muchos pueblos contigo, todos ellos a caballo, gran multitud y poderoso ejército,
Ezequiel Capítulo 38:16
y subirás contra mi pueblo Israel como nublado para cubrir la tierra; será al cabo de los días; y te traeré sobre mi tierra, para que las naciones me conozcan, cuando sea santificado en ti, oh Gog, delante de sus ojos.
Ezequiel Capítulo 38:17
Así ha dicho Jehová el Señor: ¿No eres tú aquel de quien hablé yo en tiempos pasados por mis siervos los profetas de Israel, los cuales profetizaron en aquellos tiempos que yo te había de traer sobre ellos?
Ezequiel Capítulo 38:18
En aquel tiempo, cuando venga Gog contra la tierra de Israel, dijo Jehová el Señor, subirá mi ira y mi enojo.
Ezequiel Capítulo 38:19
Porque he hablado en mi celo, y en el fuego de mi ira: Que en aquel tiempo habrá gran temblor sobre la tierra de Israel;
Ezequiel Capítulo 38:20
que los peces del mar, las aves del cielo, las bestias del campo y toda serpiente que se arrastra sobre la tierra, y todos los hombres que están sobre la faz de la tierra, temblarán ante mi presencia; y se desmoronarán los montes, y los vallados caerán, y todo muro caerá a tierra.
Ezequiel Capítulo 38:21
Y en todos mis montes llamaré contra él la espada, dice Jehová el Señor; la espada de cada cual será contra su hermano.
Ezequiel Capítulo 38:22
Y yo litigaré contra él con pestilencia y con sangre; y haré llover sobre él, sobre sus tropas y sobre los muchos pueblos que están con él, impetuosa lluvia, y piedras de granizo, fuego y azufre.
Ezequiel Capítulo 38:23
Y seré engrandecido y santificado, y seré conocido ante los ojos de muchas naciones; y sabrán que yo soy Jehová.
Ezequiel Capítulo 39:1
Tú pues, hijo de hombre, profetiza contra Gog, y di: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo estoy contra ti, oh Gog, príncipe soberano de Mesec y Tubal.
Ezequiel Capítulo 39:2
Y te quebrantaré, y te conduciré y te haré subir de las partes del norte, y te traeré sobre los montes de Israel;
Ezequiel Capítulo 39:3
y sacaré tu arco de tu mano izquierda, y derribaré tus saetas de tu mano derecha.
Ezequiel Capítulo 39:4
Sobre los montes de Israel caerás tú y todas tus tropas, y los pueblos que fueron contigo; a aves de rapiña de toda especie, y a las fieras del campo, te he dado por comida.
Ezequiel Capítulo 39:5
Sobre la faz del campo caerás; porque yo he hablado, dice Jehová el Señor.
Ezequiel Capítulo 39:6
Y enviaré fuego sobre Magog, y sobre los que moran con seguridad en las costas; y sabrán que yo soy Jehová.
Ezequiel Capítulo 39:7
Y haré notorio mi santo nombre en medio de mi pueblo Israel, y nunca más dejaré profanar mi santo nombre; y sabrán las naciones que yo soy Jehová, el Santo en Israel.
Ezequiel Capítulo 39:8
He aquí viene, y se cumplirá, dice Jehová el Señor; este es el día del cual he hablado.
Ezequiel Capítulo 39:9
Y los moradores de las ciudades de Israel saldrán, y encenderán y quemarán armas, escudos, paveses, arcos y saetas, dardos de mano y lanzas; y los quemarán en el fuego por siete años.
Ezequiel Capítulo 39:10
No traerán leña del campo, ni cortarán de los bosques, sino quemarán las armas en el fuego; y despojarán a sus despojadores, y robarán a los que les robaron, dice Jehová el Señor.
Ezequiel Capítulo 39:11
En aquel tiempo yo daré a Gog lugar para sepultura allí en Israel, el valle de los que pasan al oriente del mar; y obstruirá el paso a los transeúntes, pues allí enterrarán a Gog y a toda su multitud; y lo llamarán el Valle de Hamón-gog.
Ezequiel Capítulo 39:12
Y la casa de Israel los estará enterrando por siete meses, para limpiar la tierra.
Ezequiel Capítulo 39:13
Los enterrará todo el pueblo de la tierra; y será para ellos célebre el día en que yo sea glorificado, dice Jehová el Señor.
Ezequiel Capítulo 39:14
Y tomarán hombres a jornal que vayan por el país con los que viajen, para enterrar a los que queden sobre la faz de la tierra, a fin de limpiarla; al cabo de siete meses harán el reconocimiento.
Ezequiel Capítulo 39:15
Y pasarán los que irán por el país, y el que vea los huesos de algún hombre pondrá junto a ellos una señal, hasta que los entierren los sepultureros en el valle de Hamón-gog.
Ezequiel Capítulo 39:16
Y también el nombre de la ciudad será Hamona; y limpiarán la tierra.
Ezequiel Capítulo 39:17
Y tú, hijo de hombre, así ha dicho Jehová el Señor: Di a las aves de toda especie, y a toda fiera del campo: Juntaos, y venid; reuníos de todas partes a mi víctima que sacrifico para vosotros, un sacrificio grande sobre los montes de Israel; y comeréis carne y beberéis sangre.
Ezequiel Capítulo 39:18
Comeréis carne de fuertes, y beberéis sangre de príncipes de la tierra; de carneros, de corderos, de machos cabríos, de bueyes y de toros, engordados todos en Basán.
Ezequiel Capítulo 39:19
Comeréis grosura hasta saciaros, y beberéis hasta embriagaros de sangre de las víctimas que para vosotros sacrifiqué.
Ezequiel Capítulo 39:20
Y os saciaréis sobre mi mesa, de caballos y de jinetes fuertes y de todos los hombres de guerra, dice Jehová el Señor.
Ezequiel Capítulo 39:21
Y pondré mi gloria entre las naciones, y todas las naciones verán mi juicio que habré hecho, y mi mano que sobre ellos puse.
Ezequiel Capítulo 39:22
Y de aquel día en adelante sabrá la casa de Israel que yo soy Jehová su Dios.
Ezequiel Capítulo 39:23
Y sabrán las naciones que la casa de Israel fue llevada cautiva por su pecado, por cuanto se rebelaron contra mí, y yo escondí de ellos mi rostro, y los entregué en manos de sus enemigos, y cayeron todos a espada.
Ezequiel Capítulo 39:24
Conforme a su inmundicia y conforme a sus rebeliones hice con ellos, y de ellos escondí mi rostro.
Ezequiel Capítulo 39:25
Por tanto, así ha dicho Jehová el Señor: Ahora volveré la cautividad de Jacob, y tendré misericordia de toda la casa de Israel, y me mostraré celoso por mi santo nombre.
Ezequiel Capítulo 39:26
Y ellos sentirán su vergüenza, y toda su rebelión con que prevaricaron contra mí, cuando habiten en su tierra con seguridad, y no haya quien los espante;
Ezequiel Capítulo 39:27
cuando los saque de entre los pueblos, y los reúna de la tierra de sus enemigos, y sea santificado en ellos ante los ojos de muchas naciones.
Ezequiel Capítulo 39:28
Y sabrán que yo soy Jehová su Dios, cuando después de haberlos llevado al cautiverio entre las naciones, los reúna sobre su tierra, sin dejar allí a ninguno de ellos.
Ezequiel Capítulo 39:29
Ni esconderé más de ellos mi rostro; porque habré derramado de mi Espíritu sobre la casa de Israel, dice Jehová el Señor.
Daniel Capítulo 9:27
Y por otra semana confirmará el pacto con muchos; a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda. Después con la muchedumbre de las abominaciones vendrá el desolador, hasta que venga la consumación, y lo que está determinado se derrame sobre el desolador.
Mateo Capítulo 9:13
Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento.
Mateo Capítulo 24:1
Cuando Jesús salió del templo y se iba, se acercaron sus discípulos para mostrarle los edificios del templo.
Mateo Capítulo 24:2
Respondiendo él, les dijo: ¿Veis todo esto? De cierto os digo, que no quedará aquí piedra sobre piedra, que no sea derribada.
Mateo Capítulo 24:3
Y estando él sentado en el monte de los Olivos, los discípulos se le acercaron aparte, diciendo: Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo?
Mateo Capítulo 24:4
Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe.
Mateo Capítulo 24:5
Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán.
Mateo Capítulo 24:6
Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin.
Mateo Capítulo 24:7
Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares.
Mateo Capítulo 24:8
Y todo esto será principio de dolores.
Mateo Capítulo 24:9
Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre.
Mateo Capítulo 24:10
Muchos tropezarán entonces, y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán.
Mateo Capítulo 24:11
Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos;
Mateo Capítulo 24:12
y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará.
Mateo Capítulo 24:13
Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo.
Mateo Capítulo 24:14
Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.
Mateo Capítulo 24:15
Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel (el que lee, entienda),
Mateo Capítulo 24:16
entonces los que estén en Judea, huyan a los montes.
Mateo Capítulo 24:17
El que esté en la azotea, no descienda para tomar algo de su casa;
Mateo Capítulo 24:18
y el que esté en el campo, no vuelva atrás para tomar su capa.
Mateo Capítulo 24:19
Mas ¡ay de las que estén encintas, y de las que críen en aquellos días!
Mateo Capítulo 24:20
Orad, pues, que vuestra huida no sea en invierno ni en día de reposo;
Mateo Capítulo 24:21
porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá.
Mateo Capítulo 24:22
Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados.
Mateo Capítulo 24:23
Entonces, si alguno os dijere: Mirad, aquí está el Cristo, o mirad, allí está, no lo creáis.
Mateo Capítulo 24:24
Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos.
Mateo Capítulo 24:25
Ya os lo he dicho antes.
Mateo Capítulo 24:26
Así que, si os dijeren: Mirad, está en el desierto, no salgáis; o mirad, está en los aposentos, no lo creáis.
Mateo Capítulo 24:27
Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente, así será también la venida del Hijo del Hombre.
Mateo Capítulo 24:28
Porque dondequiera que estuviere el cuerpo muerto, allí se juntarán las águilas.
Mateo Capítulo 24:29
E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.
Mateo Capítulo 24:30
Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria.
Mateo Capítulo 24:31
Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.
Mateo Capítulo 24:32
De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama está tierna, y brotan las hojas, sabéis que el verano está cerca.
Mateo Capítulo 24:33
Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas.
Mateo Capítulo 24:34
De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca.
Mateo Capítulo 24:35
El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.
Mateo Capítulo 24:36
Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre.
Mateo Capítulo 24:37
Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre.
Mateo Capítulo 24:38
Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca,
Mateo Capítulo 24:39
y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre.
Mateo Capítulo 24:40
Entonces estarán dos en el campo; el uno será tomado, y el otro será dejado.
Mateo Capítulo 24:41
Dos mujeres estarán moliendo en un molino; la una será tomada, y la otra será dejada.
Mateo Capítulo 24:42
Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor.
Mateo Capítulo 24:43
Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir, velaría, y no dejaría minar su casa.
Mateo Capítulo 24:44
Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis.
Mateo Capítulo 24:45
¿Quién es, pues, el siervo fiel y prudente, al cual puso su señor sobre su casa para que les dé el alimento a tiempo?
Mateo Capítulo 24:46
Bienaventurado aquel siervo al cual, cuando su señor venga, le halle haciendo así.
Mateo Capítulo 24:47
De cierto os digo que sobre todos sus bienes le pondrá.
Mateo Capítulo 24:48
Pero si aquel siervo malo dijere en su corazón: Mi señor tarda en venir;
Mateo Capítulo 24:49
y comenzare a golpear a sus consiervos, y aun a comer y a beber con los borrachos,
Mateo Capítulo 24:50
vendrá el señor de aquel siervo en día que éste no espera, y a la hora que no sabe,
Mateo Capítulo 24:51
y lo castigará duramente, y pondrá su parte con los hipócritas; allí será el lloro y el crujir de dientes.
Lucas Capítulo 19:41
Y cuando llegó cerca de la ciudad, al verla, lloró sobre ella,
Lucas Capítulo 19:42
diciendo: ¡Oh, si también tú conocieses, a lo menos en este tu día, lo que es para tu paz! Mas ahora está encubierto de tus ojos.
Lucas Capítulo 19:43
Porque vendrán días sobre ti, cuando tus enemigos te rodearán con vallado, y te sitiarán, y por todas partes te estrecharán,
Lucas Capítulo 19:44
y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, por cuanto no conociste el tiempo de tu visitación.
Lucas Capítulo 21:24
Y caerán a filo de espada, y serán llevados cautivos a todas las naciones; y Jerusalén será hollada por los gentiles, hasta que los tiempos de los gentiles se cumplan.
Juan Capítulo 1:1
En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
Juan Capítulo 1:2
Este era en el principio con Dios.
Juan Capítulo 1:3
Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
Juan Capítulo 1:4
En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
Juan Capítulo 1:5
La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.
Juan Capítulo 1:6
Hubo un hombre enviado de Dios, el cual se llamaba Juan.
Juan Capítulo 1:7
Este vino por testimonio, para que diese testimonio de la luz, a fin de que todos creyesen por él.
Juan Capítulo 1:8
No era él la luz, sino para que diese testimonio de la luz.
Juan Capítulo 1:9
Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo.
Juan Capítulo 1:10
En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció.
Juan Capítulo 1:11
A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.
Juan Capítulo 1:12
Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;
Juan Capítulo 1:13
los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.
Juan Capítulo 1:14
Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Juan Capítulo 1:15
Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo.
Juan Capítulo 1:16
Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia.
Juan Capítulo 1:17
Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo.
Juan Capítulo 1:18
A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.
Juan Capítulo 1:19
Este es el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron de Jerusalén sacerdotes y levitas para que le preguntasen: ¿Tú, quién eres?
Juan Capítulo 1:20
Confesó, y no negó, sino confesó: Yo no soy el Cristo.
Juan Capítulo 1:21
Y le preguntaron: ¿Qué pues? ¿Eres tú Elías? Dijo: No soy. ¿Eres tú el profeta? Y respondió: No.
Juan Capítulo 1:22
Le dijeron: ¿Pues quién eres? para que demos respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo?
Juan Capítulo 1:23
Dijo: Yo soy la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor, como dijo el profeta Isaías.
Juan Capítulo 1:24
Y los que habían sido enviados eran de los fariseos.
Juan Capítulo 1:25
Y le preguntaron, y le dijeron: ¿Por qué, pues, bautizas, si tú no eres el Cristo, ni Elías, ni el profeta?
Juan Capítulo 1:26
Juan les respondió diciendo: Yo bautizo con agua; mas en medio de vosotros está uno a quien vosotros no conocéis.
Juan Capítulo 1:27
Este es el que viene después de mí, el que es antes de mí, del cual yo no soy digno de desatar la correa del calzado.
Juan Capítulo 1:28
Estas cosas sucedieron en Betábara, al otro lado del Jordán, donde Juan estaba bautizando.
Juan Capítulo 1:29
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.
Juan Capítulo 1:30
Este es aquel de quien yo dije: Después de mí viene un varón, el cual es antes de mí; porque era primero que yo.
Juan Capítulo 1:31
Y yo no le conocía; mas para que fuese manifestado a Israel, por esto vine yo bautizando con agua.
Juan Capítulo 1:32
También dio Juan testimonio, diciendo: Vi al Espíritu que descendía del cielo como paloma, y permaneció sobre él.
Juan Capítulo 1:33
Y yo no le conocía; pero el que me envió a bautizar con agua, aquél me dijo: Sobre quien veas descender el Espíritu y que permanece sobre él, ése es el que bautiza con el Espíritu Santo.
Juan Capítulo 1:34
Y yo le vi, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios.
Juan Capítulo 1:35
El siguiente día otra vez estaba Juan, y dos de sus discípulos.
Juan Capítulo 1:36
Y mirando a Jesús que andaba por allí, dijo: He aquí el Cordero de Dios.
Juan Capítulo 1:37
Le oyeron hablar los dos discípulos, y siguieron a Jesús.
Juan Capítulo 1:38
Y volviéndose Jesús, y viendo que le seguían, les dijo: ¿Qué buscáis? Ellos le dijeron: Rabí (que traducido es, Maestro), ¿dónde moras?
Juan Capítulo 1:39
Les dijo: Venid y ved. Fueron, y vieron donde moraba, y se quedaron con él aquel día; porque era como la hora décima.
Juan Capítulo 1:40
Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que habían oído a Juan, y habían seguido a Jesús.
Juan Capítulo 1:41
Este halló primero a su hermano Simón, y le dijo: Hemos hallado al Mesías (que traducido es, el Cristo).
Juan Capítulo 1:42
Y le trajo a Jesús. Y mirándole Jesús, dijo: Tú eres Simón, hijo de Jonás; tú serás llamado Cefas (que quiere decir, Pedro).
Juan Capítulo 1:43
El siguiente día quiso Jesús ir a Galilea, y halló a Felipe, y le dijo: Sígueme.
Juan Capítulo 1:44
Y Felipe era de Betsaida, la ciudad de Andrés y Pedro.
Juan Capítulo 1:45
Felipe halló a Natanael, y le dijo: Hemos hallado a aquel de quien escribió Moisés en la ley, así como los profetas: a Jesús, el hijo de José, de Nazaret.
Juan Capítulo 1:46
Natanael le dijo: ¿De Nazaret puede salir algo de bueno? Le dijo Felipe: Ven y ve.
Juan Capítulo 1:47
Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño.
Juan Capítulo 1:48
Le dijo Natanael: ¿De dónde me conoces? Respondió Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.
Juan Capítulo 1:49
Respondió Natanael y le dijo: Rabí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel.
Juan Capítulo 1:50
Respondió Jesús y le dijo: ¿Porque te dije: Te vi debajo de la higuera, crees? Cosas mayores que estas verás.
Juan Capítulo 1:51
Y le dijo: De cierto, de cierto os digo: De aquí adelante veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre.
Romanos Capítulo 11:25
Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles;
Romanos Capítulo 11:26
y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, Que apartará de Jacob la impiedad.
Apocalipsis Capítulo 20:1
Vi a un ángel que descendía del cielo, con la llave del abismo, y una gran cadena en la mano.
Apocalipsis Capítulo 20:2
Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo y Satanás, y lo ató por mil años;
Apocalipsis Capítulo 20:3
y lo arrojó al abismo, y lo encerró, y puso su sello sobre él, para que no engañase más a las naciones, hasta que fuesen cumplidos mil años; y después de esto debe ser desatado por un poco de tiempo.
Apocalipsis Capítulo 20:4
Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años.
Apocalipsis Capítulo 20:5
Pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años. Esta es la primera resurrección.
Apocalipsis Capítulo 20:6
Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él mil años.
Apocalipsis Capítulo 20:7
Cuando los mil años se cumplan, Satanás será suelto de su prisión,
Apocalipsis Capítulo 20:8
y saldrá a engañar a las naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra, a Gog y a Magog, a fin de reunirlos para la batalla; el número de los cuales es como la arena del mar.
Apocalipsis Capítulo 20:9
Y subieron sobre la anchura de la tierra, y rodearon el campamento de los santos y la ciudad amada; y de Dios descendió fuego del cielo, y los consumió.
Apocalipsis Capítulo 20:10
Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.
Apocalipsis Capítulo 20:11
Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos.
Apocalipsis Capítulo 20:12
Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.
Apocalipsis Capítulo 20:13
Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras.
Apocalipsis Capítulo 20:14
Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda.
Apocalipsis Capítulo 20:15
Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.